Cuando hablamos de superproducciones de grandes estudios, parece que los tiempos de producción se calculan en lo que dura un parpadeo. Se anuncia un proyecto, cierras los ojos y, cuando los vuelves a abrir, ya tienes un tráiler de dos minutos en YouTube. Vuelves a articular los párpados y ya tienes el largometraje finalizado —a veces, de aquella manera— en salas de cine intentando rascar unos cuantos millones de dólares en taquilla.
Sacrificios y sacrificados
La velocidad a la que se mueve la industria en ciertos niveles es posible únicamente si se hacen sacrificios, y uno de los más habituales —en parte, por la falta de sindicación— está centrado en unos departamentos de VFX en los que la palabra "crunch" —por no decir explotación— está a la orden del día, y que se ven sometidos a jornadas interminables durante largos periodos de tiempo para poder llegar a fechas de entrega imposibles.
Poco a poco, y esto empezó en parte gracias a una industria del videojuego que tomó conciencia después de las duras críticas, y de la extensión de este cambio de mentalidad a la igualmente tormentosa factoría nipona de anime —el caso de MAPPA y sus animadores es digno de estudio—, Hollywood ha empezado a solidarizarse con sus artistas de efectos visuales, y James Gunn parece haberse convertido en un referente a seguir en lo que a filosofía de trabajo respecta.
Cuando el flamante director creativo de la nueva y renovada DC Studios anunció que su 'Superman' había finalizado su rodaje un año antes de su fecha de estreno, no fueron pocas las voces que se alzaron manifestando cierta desconfianza e incomprensión. Muchos comenzaron a hablar de reescrituras y reshoots inevitables, pero en su cuenta de Twitter —vía DC Updates—, Gunn ha desvelado el verdadero motivo: el respeto.
Según ha explicado, el cineasta siempre se esfuerza en dar tiempo no sólo para permitir cierta calidad de vida a sus colaboradores, sino para que el resultado final luzca lo mejor posible.
"Si investigas un poco verás que mis películas siempre han tenido una aproximación diferente y que siempre he dado a mis artistas y colaboradores de VFX el tiempo para que hagan sus trabajos de forma adecuada y con el respeto que merecen. Y es por eso que la calidad de los VFX en esas películas es genial y uniforme (y porque mis amigos de Weta y Framestore y ILM y más tienen un talento increíble)".
Además, Gunn ha dado ciertos detalles que no deberían sorprendernos, pero que, acostumbrados a la dinámica actual con ciertas producciones, no dejan de chocar —¿Rodar con guiones terminados? ¿Estamos locos?—.
"Es por eso que terminamos el rodaje de Superman un año antes del lanzamiento y que han estado trabajando duramente en muchos planos desde hace meses. Es por esto que empezamos a montar durante el rodaje. Es por lo que me preparo tan a conciencia y por lo que sólo rodamos guiones terminados. Y Supergirl, que no dirijo yo, va a ser manejada del mismo modo. No puedo alabar lo suficiente a los artistas de FVX que nos ayudan a crear magia".
La promesa de que 'Supergirl', actualmente en manos de Craig Gillespie y la actriz Milly Alcock, seguirá el mismo modus operandi nos invita a soñar con un DC Universe pulido, cuidado y a la altura de sus icónicos personajes. Si termina defraudando, al menos sabremos que James Gunn ha estado en el lado bueno de la historia en lo que respecta a los valores y estándares de producción.
En Espinof | Todas las películas del Universo Extendido de DC ordenadas de peor a mejor
En Espinof | Las mejores películas de superhéroes de la década 201o
Ver 5 comentarios