"Un dolor de muelas". Con estas sencillas, pero perfectamente ilustrativas palabras, describió el realizador Andrew Davis, conocido por películas como la icónica 'El fugitivo', a Steven Seagal. Davis y el actor y artista marcial colaboraron en el debut de este último 'Por encima de la ley' y en 'Alerta máxima', tras la que se les rompió el amor de tanto usarlo y de los presuntos desplantes de Seagal.
Steven, el doloroso
Durante una conversación con motivo del 30 aniversario del estreno de 'El fugitivo', el cineasta explicó cómo el agente Michael Ovitz, alumno de Steven Seagal, que a mediados de los 80 era instructor de aikido, creyó que su sensei podría convertirse en una estrella de Hollywood: "Tuve una reunión con Warner Bros., y dijeron: 'Queremos que conozcas a este tío, Steven Seagal'. Yo dije, '¿Quién es Steven Seagal?'".
Según explica el realizador, después de la tentativa de Ovitz, se reunió personalmente con Seagal, que había quedado encantado con el trabajo de Davis en 'Código de silencio' —protagonizada por Chuck Norris—. "[Seagal] dijo, 'Vi Código de silencio y quiero que dirijas mi película.' Yo dije, 'Bueno... ¿puedes actuar?'".
La respuesta de Seagal debió ser positiva, porque en 1988 se estrenó 'Por encima de la ley', lanzando al estrellato al ahora también intérprete.
"Por encima de la ley salió y Steven se convirtió en una gran estrella de la noche a la mañana. No se parecía a nadie más con esa coleta y los movimientos de aikido. Realmente lo catapultó".
Cuatro años después, Andrew Davis y Steven Seagal volvieron a reunirse en 'Alerta máxima', pero la experiencia fue muy, pero que muy distinta. Algo que explicaría por qué en 'El fugitivo' sí repitiese colaboración con Tommy Lee Jones y no con el de la coleta.
"Era un dolor de muelas". Se había vuelto arrogante. ¡Tommy Lee [Jones] sale mucho más en Alerta máxima que Steven Seagal! Pero todo salió bien: Alerta máxima se convirtió en la película más grande de Seagal, y me consiguió El fugitivo".
Pero ojo, porque no solo Davis ha tenido palabras negativas hacia el actor. Anthony Hickox, que dirigió a Seagal en la película de 2005 'Bajo control', hablo así en Dread Central de su dinámica en el set de rodaje.
"¡Es una pesadilla!. Es imposible; no se presenta, se niega a decir cualquier frase que esté escrita, es simplemente ridículo. Me senté cuando la estaba haciendo y dije, 'Soy un mejor director que esto,' así que volví a lo que me gusta hacer, que es escribir y dirigir terror".
La lista de detractores del comportamiento de Steven Seagal parece interminable. John Leguizamo dijo de él que es un "matón" y Brian Cox, que trabajó con él en 'Glimmer Man', escribió en sus memorias que "Steven Seagal es tan ridículo en la vida real como parece en la pantalla". Cuando el río suena con tanta fuerza —y tantas veces—, desde luego que algo de agua debe llevar...
Vía | Yahoo
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