Futbolísticamente son unas pachangas de la peor categoría, sin ningún tipo de aliciente futbolístico más allá que el de ver juntos a algunos de los mejores jugadores del mundo (aunque cada vez las selecciones sean más condescendientes con eso de "los mejores") y el de esperar que la lógica relajación imperante permita ver alguna individualidad maravillosa de esas que sólo salen en los entrenamientos.
De nuevo Cuatro va a ser la encargada de la retransmisión, y lo hará esta tarde a partir de las 18:30. En fin, una nueva edición del partido contra la pobreza en el que no debemos olvidarnos de que lo principal en este caso el el objetivo final, el darle relevancia a una cuestión de la que en nuestro día a día nos olvidamos con demasiada frecuencia. Si juntar a los astros del balón y a unas cuantas cámaras sirve para eso, bien está.