'Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto': Jack Sparrow vuelve en una secuela entretenida pero sin la magia de la primera

Esta noche a las 22:05 puede verse en Cuatro 'Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto', la primera secuela de la famosa franquicia liderada por Johnny Depp como el inolvidable Capitán Jack Sparrow, quien aquí asume el protagonismo absoluto en lugar de la condición de robaescenas que ostentaba en 'La maldición de la Perla Negra'.

Espoleado por el gran éxito de la primera -recordemos que costó 140 millones de dólares y recaudó 654-, el director Gore Verbinski se permitió introducir más elementos de fantasía marinera y jugar con algún concepto más oscuro, principalmente asociados a Davy Jones y la tripulación del Holandés Errante, rara vez visto en un blockbuster de estas características.

Además, también vemos a un Depp mucho más desatado como el pirata por el que había recibido tantos aplausos que hasta llegó a ser nominado al Óscar. En 'El cofre del hombre muerto' se nota una marcada tendencia a exagerar los tics que tan bien funcionaron en la primera entrega y de los que echaría mano a menudo en esa fase de su carrera.

Luces y sombras de 'El cofre del hombre muerto'

Si en 'La maldición de la Perla Negra' teníamos un gran villano en el Capitán Barbossa interpretado por Geoffrey Rush, aquí la cosa no desmerece con el fascinante Davy Jones al que da vida el normalmente infalible Bill Nighy. Es cierto que está oculto tras una muy trabajada caracterización, pero el actor detrás de tanto retoque digital ofrece una interpretación de primera para no acabar engullido por el uso algo excesivo de los efectos visuales en la película...

Menos estimulante resulta la aportación de Orlando Bloom y Keira Knightley, pues es cierto que hasta cierto punto equilibran los excesos de Depp y le permiten brillar más, pero sus personajes son bastante menos interesantes y por momentos llegan a convertirse en un lastre, sobre todo él, quien ojalá se hubiese soltado tanto aquí como en su participación en 'Los tres mosqueteros', la actuación más divertida de su carrera.

La deuda de sangre que quiere cobrar acaba por convertirse en el gran eje de un guion que complica las cosas un poco de más, dando pie a que el metraje se dispare hasta las dos horas y media. En realidad dura apenas 11 minutos más que su predecesora, pero allí todo iba como un tiro y aquí se nota que dura demasiado, probablemente por la necesidad de contar con lo que había funcionado en la primera y además meter muchas más cosas.

Donde no hubo pega alguna que ponerle fue en taquilla, ya que 'Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto' arrasó con unos ingresos mundiales de 1.066 millones de dólares, convirtiéndose en el momento de su estreno en la tercera película más taquillera de todos los tiempos solamente por detrás de 'Titanic' y 'El señor de los anillos: El retorno del rey' . Aún hoy es la más taquillera de la franquicia y uno de los 46 títulos que ha superado la barrera de los 1.000 millones.