Cuatro ha dado el pistoletazo de salida a su programación renovada tras la fusión televisiva más comentada de los últimos tiempos. Ya podemos hacer una primera valoración de lo que, al menos, ha supuesto este primer día. Y si hay una franja que se ha visto especialmente afectada con los nuevos cambios esa ha sido la tarde que, con la llegada de Tania Llasera y Jesús Vázquez, intentará ganar audiencia lo más pronto posible.
Los chicos de ‘Tonterías las justas’ dieron paso a una Tania Llasera a la que se le notaban los nervios del primer día. Creía que la presentadora ya habría aprendido a superar los nervios escénicos, sobre todo si tenemos en cuenta que en menos de un año y medio se ha tenido que enfrentar a tres debuts televisivos en tres cadenas diferentes. Pero no, se ve que esto de los nervios siempre aparecen como mínimo en el primer día.
Y cuando la quinta edición de ‘Fama‘ comenzó, por fin pudimos dejar de imaginar como sería el reality presentado por Tania Llasera para comprobarlo en directo. Nerviosa, algo perdida en ocasiones (cosas del primer día) y con un baile inicial más que digno, la nueva presentadora llegó dispuesta a que olvidásemos lo antes posible a la anterior. Esta misión ya parece más complicada. Paula Vázquez derrochaba energía presentando, algo que le costará conseguir a Tania Llasera teniendo en cuenta de donde viene. No es lo mismo conducir un reality que domar a las fieras del corazón de Telecinco, por lo que Tania tiene por delante un trabajo duro para conseguir conectar con su nuevo público.
Público al que también pudimos ver en el nuevo ‘Fama’. Estrenaron nuevo plató en el que un espacio está lleno de gradas para aquellos que vayan a ver las galas en directo. Se sustituye así a los grupos de jóvenes dando palmas que en ocasiones veíamos en otras ediciones de ‘Fama’. Y entre ese público un nuevo cambio. Parece que los familiares de los concursantes tendrán presencia diaria en cada programa, un cambio que sí atribuiría a la mano de Telecinco.
La aparición de los familiares le va a dar a ‘Fama’ más esencia de reality de la que ha tenido en sus cuatro ediciones anteriores, cuando sólo nos teníamos que preocupar de que los vídeos estuvieran más centrados en las relaciones de los concursantes que en sus progresos como bailarines. Pero con esta edición se han añadido elementos que pueden cambiar la esencia de lo que ‘Fama’ ha sido hasta ahora.
Al igual que lo puede cambiar la aparición de un jurado, al que han descrito como independiente, compuesto por Lola González, directora de la academia, Vanexxa, cantante de hip hop y Javier Gurruchaga, showman ya conocido en nuestra televisión. Sin duda la presencia de Gurruchaga es la que, desde que se anunció su fichaje, me ha dejado más asombrado. No encuentro mucho sentido a su presencia como jurado y me da miedo que el hecho de que este sea considerado independiente signifique la creación de polémicas con los profesores por ganar audiencias.
Lo único que no ha cambiado ‘Fama’ y que en mi opinión era fundamental, es su horario. Sigue a las 17:00, después de ‘Tonterías las justas’, por lo que es probable que su audiencia se mantenga como hasta antes de Navidad. Eso sí, esta edición se reserva una parte del programa para las 21:00, después de la edición de noticias de la noche y como telonero de ‘El hormiguero’. Puede ser una buena toma de contacto con una nueva franja que explotar en un futuro si la tarde no termina de funcionar.
Y, después de ‘Fama’, Jesús Vázquez llegó de nuevo con sus cajas en la vuelta de ‘Allá tú‘. El concurso ha vuelto con pocos cambios y por un momento parecía como si el tiempo no hubiese pasado. Los mismos premios, el mismo presentador, hasta las cajas son las mismas que las que vimos en el programa original. Eso sí, como novedadades, nuevo plató, más familiares presentes en un programa y la aparición de la mascota del concurso, el pollito, con una canción con la que seríamos más felices si nunca antes hubiésemos escuchado.
No entiendo por qué han decidido cambiar ‘Dame una pista’ por ‘Allá tú’. El programa de Luján Argüelles era mucho más divertido y entretenido que el de Jesús Vázquez, que ganaría algunos puntos si se emitiera en directo. Esta tarde he echado de menos a Luján. Aunque en los últimos meses la audiencia no la ha acompañado, es una gran presentadora que ha demostrado que maneja los concursos con gran soltura y que conseguía darle una seña de identidad propia a la cadena.
Pero las decisiones ya están tomadas y ahora sólo falta esperar a que las audiencias acompañen a los cambios que se han dado, algo para lo que habrá que esperar algunos días. De momento, parece que la segunda edición del informativo está fracasando a las 20:00. La Sexta le lleva ventaja a Cuatro en este terreno y a la cadena no le queda más remedio que seguir trabajando para demostrar el acierto que se supone que ha sido su fusión con Telecinco.
En ¡Vaya tele! | Las tardes de Cuatro, ¿éxito o fracaso?