Samanta Villar estrenó anoche su '21 días haciendo porno'. Como indicador de una opinión general que deja entrever una tendencia entre la audiencia, por lo que se pudo leer en Twitter en #21dias, muchos espectadores estaban realmente decepcionados con el programa porque Samanta finalmente no protagonizó una escena porno, obvio. A mi el programa no me decepciono en absoluto, probablemente porque sea el '21 días' que más se han tomado en serio y os voy a explicar por qué.
En primer lugar, Cuatro es una televisión comercial. Y como cadena comercial que es, dan lo que pide su audiencia dentro de unos límites bastante flexibles que ellos mismos se interponen. Así que no es sorpresa inesperada que hayan hecho finalmente un programa deseo de muchísimos espectadores de '21 días' y simpatizantes de Samanta de alguna u otra manera. Partiendo de esa premisa, creo que trataron el contenido pornográfico bastante mejor de lo que me esperaba. Se preocuparon en buscar el argumento de un actor/director de cine porno que grababa en lugares públicos, sobre la gente, en especial los niños, y dijo algo como "lo único que me preocupa es que puedan aparecer familias o niños y nos vean, porque no tienen porque enterarse y ver ciertas cosas en determinadas edades".
Argumentos como el de un matrimonio en el que el marido fue, continúa y continuará siendo actor porno (y no enseñaron la parte de su casa que él no quería por corte, otros lo hubieran intentado de cualquier manera, como con una cámara oculta...), una madre actriz porno que tiene un hijo pequeño que aún no lo sabe o las confesiones de una actriz porno por vocación. Se mostraron datos como sueldos reales, no sueldos máximos que se han llegado a pagar... Eso sí, no estoy para nada de acuerdo con Cuatro y la forma de autopromocionar que han optado por hacer. Todo el mundo que no reflexionara un mínimo sobre el papel de Samanta en el programa se pensaba que iba interpretar una escena porno, porque las promos dieron a entender eso cuando era obvio que no lo iba a hacer. ¿Es eso engañar a la audiencia?
¿El objetivo? Conseguir el 18,4% de audiencia, equivalente a una media de 2.478.000 espectadores que vieron el programa. Y sería muy interesante conocer las estadísticas de Play Cuatro, porque anoche el directo de Cuatro por internet estaba innacesible por saturación de visitas. Llegado a este punto, veo dos caminos:
'21 días en el mundo del porno' es un punto de inflexión en el programa, que ha marcado un pico, y su tendencia natural en el próximo es bajar estrepitosamente a datos más típicos. Un punto de inflexión de cara a un programa que o bien está cerca de su fin, o va a cambiar de alguna manera y querían hacer realidad el programa que pide la audiencia desde '21 días viviendo en la calle'.
Una campaña de promoción para Cuatro y Samanta fuera de la propia cadena con la que salen ganando todos por popularidad en el boca a boca.
Respecto a la presentadora, tengo varias opiniones, todas positivas. Por una parte, me dio la sensación de que el tema del reportaje le venía grande en muchas ocasiones, no grande en el sentido de "no puedo" por seguridad como ocurrió en '21 días en la mina', sino grande en el sentido de que ella misma veía poco respeto hacia su persona, pudor (por ejemplo, con Torbe y determinadas bromas de poca gracia para ella). Este fue el gran indicador de que Samanta nunca hará una escena porno en '21 días', aparte de que una periodista duramente degradaría su carrera profesional con un reportaje de esa manera, porque eso no sería investigación ni vivencia para contar, sería otra cosa.
Samanta esta vez lo ha hecho bien, pese a que sigo sin estar de acuerdo con su estilo. Ha sido el '21 días' en el que más realista y ajena se ha mostrado frente a las historias y el menos subjetivo. Quitando algunas partes de confesiones de cámara, la escena del plátano en el desayuno y lo del pintalabios, poco más, lo demás me parecieron reflexiones que tendríamos cualquiera de nosotros dispuesto a opinar un mínimo sobre el tema.
Hay que recalcar que también fueron muy cautos respecto a otros. Abundaron los planos de espalda y pocos detalles explícitos introdujeron en el programa durante las escenas porno. Habría que ver como hubiesen realizado este programa para Telecinco, por ejemplo. No entendí del todo por qué pixelaban a algunos hombres en ciertas ocasiones y no en otras, como cuando no podían realizar una escena.
Personalmente, el programa no me decepcionó nada de nada. Emitieron justo lo que me esperaba que iban a emitir, con las expectativas que tenía e incluso Samanta me sorprendió por tener una vivencia más seria que otras.
En ¡Vaya Tele! | '21 días en el mundo del porno' será finalmente una realidad