El auge de las plataformas de streaming ha hecho que se popularicen los estrenos mundiales de la mayoría de series norteamericanas. Sin embargo, se hace tanta ficción televisiva allí que algunos títulos se quedan por el camino, a menudo sin que sepamos muy bien cuál es el motivo. Una de las "víctimas" más destacadas de los últimos años es 'Yellowstone', una de las producciones por cable más populares en Estados Unidos durante los últimos años.
De hecho, la serie protagonizada por Kevin Costner cuenta ya con tres temporadas a sus espaldas y ha sido renovada por una cuarta, pero en España no habíamos podido ver ni una solo episodio hasta que Paramount Network ha decidido estrenar su primera temporada este lunes 18 de enero de 2021 con un episodio de duración doble que sienta las bases de este estimulante drama con sabor a western moderno.
Con calma
He de confesar que lo que más me atraía a priori de 'Yellowstone' no era que Costner diese vida a su protagonista, sino la gran implicación de Taylor Sheridan en la creación y escritura de la película. Y es que a Sheridan debemos los libretos de 'Sicario' -y su estupenda secuela-, 'Comanchería' y 'Wind River', habiéndose ocupado también de la puesta en escena de esta última. Todas ellas películas muy estimulantes que iban alimentando poco a poco la intensidad hasta que todo explotaba.
La duda estaba en ver cómo aplicaba eso en una serie que cocreó junto a John Linson ('Hijos de la anarquía'), escribiendo además los guiones de todos los episodios, la gran mayoría de ellos en solitario, y dirigiendo al completo la primera temporada. Y es que sus trabajos anteriores estaban marcados por un ritmo pausado que podría no casar bien con temporadas de 10 episodios, pero no hace falta más que ver su extenso piloto para tener claro que ha sabido resolverlo con fortuna.
Y es que en 'Yellowstone' encontraremos una amplía galería de personajes inteligentemente escritos para que se cumplan una serie de premisas básicas para que queramos saber más de ellos. La primera es que cada uno tenga su propia voz en forma de tramas dedicados a ellos que aporten al conjunto, consiguiendo así presentarse a todos ellos, sus motivaciones y dejando ver por dónde podrían ir los tiros sin desvelar más de la cuenta.
Por otro, en 'Yellowstone' no se apuesta por mostrar héroes y villanos al uso en beneficio de una lucha de poder con el suficiente gancho como para despertar la curiosidad del espectador. Ya en el primer episodio hay una secuencia especialmente intensa sin que ello suponga renunciar a un ritmo reposado inusual en las series de televisión actuales que nos llegan desde Estados Unidos.
Una disputa con sabor a western
Para ello resulta esencial el hecho de que 'Yellowstone' no deja de ser una especie de western moderno, pues fácil ver al personaje de Costner y su tensa relación con el líder de la reserva de nativos americanos como una actualización de la rivalidad entre vaqueros e indios. Esto es algo que se percibe también en el trabajo de puesta en escena de Sheridan, donde también se potencia el uso de parajes naturales, dotando así a la serie de una personalidad visual que hace pensar más en el pasado que en la actualidad.
Esa lucha de poder también recuerda a series tan populares como 'Juego de Tronos' o 'Succession', con los Dutton defendiendo el rancho más grande de Estados Unidos frente a aquellos que quieren hacerse con parte del mismo, por no hablar de lo que se intuye sobre la necesidad de encontrar un sucesor para el patriarca interpretado por Costner, algo que ya empieza a complicarse más de la cuenta en este primer episodio.
Eso sí, esto es algo que aparece en el primer episodio de 'Yellowstone' de forma tenue, meros ingredientes dentro de una serie destinada a explorar principal la rivalidad de John (Costner) con otros personajes cuya ambición les lleva a chocar de lleno con la familia Dutton. La paciencia promete ser algo clave en todo esto, tanto la de los personajes -un movimiento en falso puede echar todo al traste- como del público, quizá muy acostumbrado últimamente a que le den acción y respuestas a las primeras de cambio.
A todo lo destacado hay que añadir la solvencia de su reparto, con varios rostros conocidos para el público más allá de Costner. De hecho, el protagonismo de este último dista mucho de ser absoluto en beneficio de un enfoque más coral que ayuda a que la serie tenga otra dimensión. Obviamente, cada cual tendrá su personaje favorito, pero todos tienen su función dentro del engranaje de la serie sin sentirse como meros complementos.
En resumidas cuentas
'Yellowstone' es una serie diferente dentro del panorama actual, dándose la curiosidad de que una propuesta de corte más clásico se sienta como un soplo de aire fresco. No es ni mucho menos perfecta, pero se agradece una propuesta así tan cuidada que deja respirar tanto a la historia como a sus personajes. Seguiré viéndola.
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