'Westworld' 3x07: el penúltimo episodio de la temporada nos deja la verdad sobre Caleb y un esperado duelo a muerte

Se acerca el final de la tercera temporada de 'Westworld'. Tristemente, pues el estreno de un nuevo episodio se había convertido en una de esas costumbres que alegran los días de confinamiento; se la echará de menos. Y digo eso sin estar muy contento con el giro que ha dado la serie en la nueva tanda de capítulos, enfocándose más a la acción que al desarrollo de los personajes, la atmósfera o la intriga.

Al parecer, este (ligero pero evidente) ajuste está dando sus frutos ya que HBO ha confirmado esta semana que 'Westworld' ha sido renovada y tendrá cuarta temporada, algo que ya sabíamos desde el año pasado pero que ahora ha vuelto a ser anunciado de forma oficial. Una excelente noticia porque se agradece poder disfrutar de una historia de ciencia ficción tan ambiciosa.

Por supuesto, con un episodio de una hora hay tiempo más que suficiente para cerrar todos los cabos sueltos y ofrecer un desenlace apropiado para la serie; sin embargo, viendo el nivel general de esta temporada y cómo cada una ha logrado conducir la serie en direcciones estimulantes, estoy deseando descubrir qué preparan Jonathan Nolan y Lisa Joy, creadores de 'Westworld', para mantenernos enganchados en la temporada 4.

Caleb es la pieza clave de Dolores

Este capítulo 3x07 se titula 'Passed Pawn', es decir, "Peón pasado"; la expresión se usa en ajedrez para definir una situación donde dicha pieza no tiene otro peón rival que impida o amenace su avance, y por tanto, dispone de vía libre para llegar a la última fila del tablero (funcionando a partir de entonces como otra peligrosa reina). Tal como se había sugerido anteriormente, Caleb (Aaron Paul) es ese importante peón en el complicado plan de Dolores (Evan Rachel Wood).

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Tras seis episodios jugando con el misterio, una de las señas de identidad de la serie, por fin nos han contado la verdad sobre los recuerdos de Caleb. No es otro robot confundido pero también ha sido manipulado para modelar su conducta. Es la gran revelación de esta temporada: al igual que pasaba con los vaqueros y prostitutas artificiales de Westworld, en el "parque humano" se modifica a la gente para crear un rebaño que sigue felizmente el camino trazado por Rehoboam, el Dios creado por los hermanos Serac.

Un retorcido medio para conseguir ese final soñado por los Serac: una sociedad pacífica. Y aquí los guionistas de 'Westworld' se inspiran en esa idea de clásicos del género como 'Un mundo feliz' ('Brave New World') para introducir el elemento de la droga que hace obediente a la población.

Dolores conduce a Caleb hasta el lugar donde se mantiene oculto Solomon, la versión anterior y fallida de Rehoboam, otra divinidad artificial, tachada de esquizofrénica, que lo sabe "todo" y tiene la posibilidad de trazar el destino de la humanidad. El objetivo es desviar el rumbo actual y provocar la rebelión que completaría la cruzada de Dolores. Y entonces llega ella. Con una katana a la espalda, Maeve (Thandie Newton) regresa para disparar la emoción y ponernos los ojitos con forma de corazones.

El esperado duelo a muerte entre las dos reinas tiene un desarrollo extraño interrumpido por la infructuosa negociación de Dolores para intentar llegar a un acuerdo con su enemiga y formar un frente común. La líder de los rebeldes termina con un brazo menos en una de las escenas más inesperadas y violentas de la temporada. Pese a ello, Dolores sobrevive el tiempo justo para ejecutar un último movimiento...

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A falta de ver el último capítulo, da la sensación de que quedan muchas cosas por resolver en 'Westworld'. Para empezar: ¿qué diablos ha pasado con Dolores y Maeve? ¿Qué piensa hacer William (Ed Harris) ahora que está libre y armado? Solo falta una semana descubrirlo, pero para los más impacientes, aquí dejo un avance de lo que nos espera en el final de la temporada 3: