Mañana, viernes, 14 de marzo, se estrena 'Vaya par de productoreX' ('I want Candy', 2007), el film de Stephen Surjik, interpretado por Carmen Electra en el personaje de una actriz porno, Candy Orificios (Fiveways en el original). La acompañan Tom Burke y Tom Riley en los papeles protagonistas.
Dos jóvenes estudiantes de cine ven frustradas sus esperanzas de convertirse en los nuevos talentos de la gran pantalla cuando su profesor de realización limita la práctica que pueden hacer en la escuela a una duración ridícula. Para dar el salto al largo, su única opción será realizar una película porno y se pondrán manos a la obra. Como su presupuesto es mínimo, la casa de los padres de uno de ellos se convertirá en plató, aún a riesgo de que los pillen cuando vuelvan del trabajo en su autoescuela.
No es que quiera defender esta película, pues buena no es, pero sí que me gustaría decir que no es, en absoluto, lo que cabría esperarse, para bien o para mal. Se trata de una producción de la Ealing y a cualquiera que conozca el trabajo de esta productora, este dato le dará más pistas sobre lo que se puede esperar de este film que su título o su famosa ex-vigilante de la playa: buenos sentimientos, planes positivos, ambición, logro de los sueños… y un humor bastante blanco. El tema de la pornografía, que será lo que atraiga a unos cuantos espectadores a la taquilla y lo que cree rechazo en muchísimos otros, en realidad, es lo de menos. Se podría tratar de rodar cine porno como de fabricar un tejido mágico, daría lo mismo. Ya que hablamos de cine británico, añadiría que la pornografía en 'Vaya par de productoreX' no es más que el McGuffin.
Como ya os conté, la Ealing, productora de ‘El quinteto de la muerte’ (‘The Ladykillers’, 1955), de Alexander Mackendrick; ‘Oro en barras’ (‘The Lavender Hill Mob’, 1951), de Charles Crichton; ‘El hombre vestido de blanco’ (‘The man in the white suit’, 1951), también de Mackendrick, etc… resucitó después de más de cuatro décadas de inactividad con 'La importancia de llamarse Ernesto' ('The Importance of Being Earnest', 2002), 'Valiant' (2005) y 'Rosas rojas' (Imagine me and you', 2005), entre otros títulos. De todas estas producciones recientes, 'Vaya par de productoreX' es la que más mantiene el espíritu de las antiguas comedias optimistas, aunque no está a la altura, como tampoco llegan a esos niveles las otras rodadas en este siglo.
Se trata, como digo, de una comedia más bien infantil e inocente. Y lo que nos importa, por lo tanto, es saber si hace gracia o no. En realidad, hay que admitir que tiene un par de chistes buenos y que es más o menos amena y entretenida. Además de las bromas un tanto subidas de tono, lo mejor es el retrato de los estudiantes de la escuela de cine y, en especial, de su profesor, interpretado por MacKenzie Crook (el tuerto de 'Piratas del Caribe'). Y tampoco está mal el del productor porno.
El guión peca de previsible y de clásico y falla en su intento de incluir tramas románticas que ni encajan en el resto de la historia ni se resultan en absoluto creíbles. Igualmente adolece de una blandura del final, que, por otro lado, en realidad es lo que encaja con el devenir de la historia.
Como a nadie le importará eso, no me voy a molestar en decir que Carmen Electra no actúa demasiado bien o que su personaje de culta cinéfila no hay quien se lo crea… ah, que ya lo he dicho. Bueno, ahí queda. Los intérpretes británicos sí están acertados en sus papeles, pero eso tampoco haría falta decirlo por otro motivo: cuando alguien vea a un actor inglés hacerlo mal, que me avise. Los dos protagonistas, tratando desde lejos de emular al gran Hugh Grant, abusan un tanto de los gestos faciales para lograr la comicidad, pero son capaces de despertar algo de empatía a pesar de lo vacíos que están sus personajes y le dan un encanto a la película que es lo que más poderosamente la aleja de la comedia zafia que nos imaginaríamos por su título.
Después de dirigir 'El mundo de Wayne II: qué desparrame', Surjik se ha dedicado exclusivamente a realizar capítulos de series televisivas y eso se acusa en la forma en la que está rodada 'Vaya par de productoreX', film al que se le nota demasiado la falta de presupuesto. A pesar de eso, la película tiene momentos divertidos y no se trata del film soez que se podría esperar, aunque esto último no sé si es positivo o negativo.