Luke Skywalker ha regresado a Tatooine, su planeta de origen, para intentar rescatar a su amigo Han Solo de las garras del malvado Jabba, el Hutt. Pero Luke ignora que el IMPERIO GALÁCTICO ha comenzado en secreto la construcción de una nueva estación espacial armada, más poderosa que la temida Estrella de la Muerte. Una vez terminada, este arma suprema significará la aniquilación del pequeño grupo de rebeldes que lucha para restaurar la libertad en la galaxia…
Como quiera que la percepción del tiempo de un niño es muy diferente a la de un adulto, sería fácil afirmar que los tres años que transcurrieron entre 'El imperio contraataca' ('Star Wars: Episode V - The Empire Strikes Back', Irvin Keshner, 1980) y 'El retorno del jedi' ('Star Wars: Episode VI - Return of the Jedi', Richard Marquand, 1983) se hicieron eternos debido a los muchos meses que tuvimos que aguardar pacientes hasta poder ver en los cines la entrega que cerraría la trilogía galáctica. Podría afirmarlo, pero estaría mintiendo vilmente para comenzar así esta última entrada de nuestro repaso a la saga de George Lucas de una forma más poética.
La realidad es que, hace treinta años, si pasabas de tener cinco a ocho años entre uno y otro filme, como era el caso, de lo último que estabas enterado era de la actualidad cinematográfica y lo que importaba era, en lo que al séptimo arte respecta, que llegara el viernes y tus padres te llevaran al cine a ver lo que se estrenara. Y lo que se estrenó durante aquella terna de años llenó el tiempo más que de sobra para que este redactor olvidara que el cierre de 'El imperio...' había dejado la puerta claramente abierta a una continuación en la que Luke, Leia, Chewie, Lando, C3-PO y R2-D2 tenían que rescatar a Han de las garras de un Jabba que hasta entonces nadie había visto.
Problemas, desde el principio

Que Lucas metiera mano en el guión de esta última entrega como no lo había hecho en el de su inmediata predecesora es, sin duda alguna, uno de los males que más afecta al filme y que provoca la fuerte infantilización que el devenir de la acción sufre llegado el momento en que los protagonistas desembarcan en la superficie de la luna de Endor. Más no empiezan ahí las escasas pero abultadas fallas que, al menos en lo que a historia se refiere, atesora la ultima parte de la trilogía original, siendo el primer acto un perfecto precedente de la endeblez de la que hará gala a nivel argumental la terna de precuelas.
Tan sólo con rascar por encima de la superficie del rescate de Han Solo del palacio de Jabba, uno se da de bruces con un hilo raquítico, poco sostenible y tremendamente complicado: ¿en serio hay que creerse que la infiltración paulatina de todos los miembros del grupo estaba planeada de antemano hasta el último detalle por Luke? Hombre, el chaval se muestra mucho más resuelto, y es genial que se crea que es un jedi y que se vista de negro como su padre, pero de ahí a tragarnos lo que se nos pretende meter con calzador, hay un trecho bastante insalvable.
Como muchos seguro aduciréis, esto no es arte y ensayo, y tampoco hay que ser tan exigentes con el guión de un filme de entretenimiento y fantasía. A lo que yo respondería que, muy de acuerdo, pero que son igualmente comprensibles los argumentos que echan por tierra tanto las carencias iniciales del libreto como las que acusa rondando su final cuando el inmediato precedente con el que la cinta puede ser inevitablemente comparada es del calibre del que Lawrence Kasdan y Leigh Brackett escribían para 'El imperio...', un guión que, como veíamos ayer, carecía por completo de fisuras.
Sentido del espectáculo

Ahora bien, las muy evidentes fallas del libreto, quedan suplidas, no cabe duda, por un ritmo imparable —que sólo se detiene en el regreso a Dagobah, una secuencia espléndida y necesaria, por otra parte— y por un sentido del espectáculo que busca asombrar y hacerlo cada vez más conforme avanza el metraje. Asumiendo esa premisa, resulta sencillo valorar de forma muy positiva aquello que bajo el prisma de la historia no lo es tanto, y desde que Luke cae en el foso de Rancor hasta que se las apañan para reventar la barcaza de Jabba, todo en el filme es una fiesta de acción perfectamente coreografiada en la que brillan, con diferentes intensidades, Richard Marquand y John Williams.
El primero, sobre cuya autoría mucho se discutirá en tiempos posteriores —si ya se hizo con Keshner, con el responsable de 'El ojo de la aguja' ('Eye of the Needle', 1981) más aún—, lleva a cabo un trabajo tan impecable como carente de personalidad, una cualidad ésta que lejos de servir como escollo para que la historia fluya con plenitud, ayuda precisamente a que el avance de la misma no encuentre estorbo alguno en su camino. Porque muchas cosas podrán aducirsele a 'El retorno del jedi', pero ninguna de ellas pasan por acusarla de resultar aburrida aunque sea sólo por un instante.

Del segundo ya hemos hablado tanto en las cinco entregas previas de este recorrido por la saga —sobre todo en las dos últimas— que llegados a este punto, poco habría que añadir al respecto de su más que demostrada maestría a la hora de poner música y alma al universo galáctico: reutilizando y reorquestando a placer todos los temas previos más que ensayados en las dos cintas anteriores, Williams añade aquí la sorna de los metales para describir a Jabba o el juego entre cuerdas y viento en lo que corresponderá a la peor invención de George Lucas para la franquicia sólo por detrás del odiado Jar-Jar Binks, los Ewoks.
Antes de hablar de ellos, no obstante, permitámonos concluir con la apreciación hacia el trabajo del maestro de los pentagramas valorando sobremanera el titánico esfuerzo que el compositor lleva a cabo de cara a la batalla de Endor, más de media hora ininterrumpida de música en la que Williams echa mano de todos sus recursos para configurar el mejor y más preciso acompañamiento que podría haberse deseado para el clímax de los clímax, ese trío de acciones paralelas en diferentes localizaciones y con diferentes personajes del que hablaremos un poco más abajo.
¿Peluches? ¿en serio?

Volvamos ahora sí a Endor, al arranque pleno del segundo acto y a esas criaturas "adorables" que son los osos de peluche tamaño niño de cinco o seis años que, contra todo pronóstico, se convertirán en héroes capaces de salvarle el día a la alianza rebelde y provocar la victoria en la batalla sobre la luna santuario. Quizás su inclusión por sí sola no sea tan criticable —y entrecomillen esto último todo lo que quieran y un poco más— como el hecho de que, enfrentada a lo que resulta lo mejor y más valorable de todo el tramo final, las fricciones entre la vertiente más oscura y adulta de la trama y la flagrante infantilización que comportan los ewoks generen agudas estridencias.
No en vano, como digo, si hay algo que valorar por encima de cualquier otra cosa en 'El retorno del jedi' eso es todo lo que concierne a la historia de Luke y Darth Vader y, por supuesto, a la muy agradecida inclusión que entre ellos supone la aparición del Emperador, un ser despreciable que hace que Vader parezca un oso amoroso y que da pie a la secuencia antológica por excelencia del film, aquella en la que padre e hijo se enfrentan con sus espadas de luz en un duelo que, sabemos, determinará en buena parte el futuro de la galaxia.
No voy a plantearme, porque nunca lo he hecho, el cómo un niñato que no ha tenido con quién entrenar puede enfrentarse a un sith como Vader en igualdad de condiciones; más que nada porque a la luz de lo que ofrece dicho enfrentamiento, de lo bien que funciona dentro del tejido de la historia global de la trilogía y de la dimensión épica que adquiere el personaje que una vez fuera Anakin Skywalker, dichas disquisiciones estarían de más. En su lugar, quede claro que el que esto suscribe tiene en la más alta estima un sesgo del triple clímax final que, como ya he dicho en otros puntos de estas entradas, sigue transmitiendo las mismas emociones que hace treinta años.
'El retorno del jedi', 'Star Wars' 1.5

Llegados a este punto, hay que rescatar ese pequeño apunte que hacía párrafos arriba hacia las carencias de la historia en su tramo final y en el hecho de que, unido al planteamiento de base del filme —otra estrella de la muerte que los rebeldes deben destruir—, 'El retorno del jedi' sea en esencia una reimplementación aumentada y corregida de los esquemas de la primera entrega de la saga. Unos esquemas que, adornados con un grandioso espectáculo de pirotecnia y asombrosos efectos visuales, no son capaces de ocultar que uno de sus fundamentos sea el que las naves rebeldes ataquen el punto débil de la estación de combate.
Podría defenderse dicha decisión como aquella que da cierre a la saga equiparándola con el comienzo, pero soy de los que siempre han pensado que no hubiera sido tan complicado haber buscado otra manera de terminarla, igual de espectacular, sin la necesidad de recurrir a la mera copia más añadidos que es la media hora final de la cinta. Una media hora que, de nuevo, sirve para prefigurar de forma directa lo que veremos dieciséis años después en 'Star Wars. Episodio I: La amenaza fantasma' ('Star Wars. Episode I: The Phantom Menace', George Lucas, 1999) y que, afortunadamente, cuenta con un montaje que no hace de ella un trance de difícil asimilación.

Todo lo contrario. Imbuido en ese espíritu de espectáculo asombroso al que hemos afirmado se asocia todo el metraje, tanto la batalla estelar en los alrededores de la segunda estrella de la muerte, como aquello que tiene lugar en el interior de la misma —insisto, lo mejor de la cinta— y lo que discurre en los frondosos bosques de Endor resulta apasionante, intenso y, una vez finaliza, deja con ganas de mucho más. Marquand —y Lucas en la sombra— orquesta un circo de tres pistas preciso que no da respiro al espectador y que lo somete a un constante vaivén sin darle tiempo a recuperar el aliento.
De acuerdo, me quedo de lejos con el cierre de 'El imperio...' y en segundo lugar con la batalla de Yavin por ser la pionera, pero este triple cierre, ejecutado con brío y talento, pone en evidencia desde sus treinta y dos años de edad a aquellos que culminaron los episodios I y II, dejando claro, como comentaba hace unos días, que el férreo control que George Lucas quiso ejercer sobre la nueva trilogía, no sentó nada bien a un universo que con este final, este cierre que parecía ser un hasta siempre, culminaba seis años de lo mejor que la fantasía había ofrecido hasta entonces —y desde entonces— y daba inicio a una leyenda que a partir de mañana será perpetuada, o eso parece, gracias a 'Star Wars. Episodio VII: El despertar de la fuerza' ('Star Wars. Episode VII: The Force Awakens', J.J. Abrams, 2015).
Otra crítica en Blogdecine | 'El retorno del jedi', Lucas vs. Kasdan
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Bob
Otro fallo que siempre se señala, a parte de los ewoks, es que aquí Ford y Leia están desganadísimos, y no demuestran ni una quinta parte de la química de las dos anteriores (sobre todo El Imperio Contraataca...). Esa desventaja queda disimulada con el hecho de que una vez salvado Han Solo de la guarida de Jabba el Hutt, esa historia de amor ya no nos interesa y la atención se centra, como no podía ser de otra manera, en el duelo físico y psicológico entre Luke y Vader, sabiendo ya que son padre e hijo. Es un grandísimo acierto, por otra parte, la inclusión definitiva de un villano máximo, representación pura del Mal, como es el Emperador, justo en la entrega en la que Vader pasa de villano a figura trágica.
Otro flaqueza que se le ve al guión, es el descubrimiento de que Leia y Luke son hermanos, no aporta nada a la trama (da lo mismo que tenga la Fuerza, no la usa, aparte de "percibir" que Luke sigue vivo), más allá de ser un recurso facilón para acabar de un plumazo con el posible triángulo amoroso que podían entre ellos y Solo, algo que solo cabía imaginar en la primera y al principio de la segunda de la trilogía, pero nada más.
Con todo y con eso, un muy buen cierre por todas las razones ya expuestas y consabidas por casi todos.
gunzalobill
Ay , que no nos gusta El retorno del jedi porque salen Ewoks, que somos muy maduros.
¡Los ewoks os meten de hostias a todos pringaos!
Cada vez que recuerdo esa escena en la que dos ewoks se lanzan a tierra para esquivar un disparo de AT, y lo que ocurre después, se me humedecen los ojos joder. Una de las escenas más bellas y emocionantes del cine. Que grandes los ewoks y que gran película.
El Fabuloso Dr. Manga
El segundo asalto a la estrella de la muerte para mi gusto es la batalla espacial más espectacular que existe (la huida por el campo de asteroides no cuenta como batalla). Realmente es donde se ve que los rebeldes las van a pasar canutas por muchos cruceros y muchas nuevas naves que tengan (me encantan los A-wing).
Por cierto, que la versión Despecialized del Retorno todavía está muy tierna (sólo es la 1.0,), y Harmi ha dicho que todavía queda por retocar (muy grande lo que está haciendo este Harmi).
lacedemonio
Y aquí está una de las grandes decepciones del Episodio III y que no comentaste en tú respectiva crítica, Sergio: Este Emperador es el verdadero Emperador. Este personaje inquieta, da respeto, es tenebroso, poderoso, inteligente... ¿Y el emperador del Episodio III? Un absoluto imbécil que sobreactua, no acojona a nadie, tiene un "humor" absurdo, pierde el respeto cada 30 segundos, autoridad 0.... Para mi fue VERGONZOSA la personalidad del emperador en Episodio III.
VERGONZOSA. Me llama soberanamente la atención que ni comentaras este dato, que ni comparases ahora semejante radicalidad entre el mismo personaje, interpretado por el mismo tio, en la misma saga (no digo Palpatine, que conste).
Repugnante en el Episodio III y sigue sin entrarme en la cabeza.
pcalzadolopez
Lo que le pasó a Lucas es que ni él previó lo mucho que iban a vender los juguetes para niños después de la primera película. Es ampliamente conocido que para él, "El Imperio Contraataca" es la más floja de la saga. ¡Claro, porque era una película seria que daba poco pie a la creación de muñequitos! Alguno había, Boba Fett y eso, pero nada comparado con las siguientes películas, en las que ya quiso él controlar todo, y empezaron a aparecer toda suerte de personajes ridículos, pero que se iban a vender muy bien dentro de los Kinder Sorpresa.
Por eso salieron todos los bichos raros del Palacio de Jabba, los ewoks, y años más tarde, personajes como los robots de la Federación de Comercio o, de forma más evidente, el General Grievous.
También esto se nota en el detalle de que, en "El Retorno del Jedi", por primera vez, Lucas empieza a cambiar diseños de forma escandalosa. ¿Por qué los stormtroppers visten distinto, si el traje nuevo también es un blanco brillante que no camufla nada? Esto se verá más claro en las precuelas, donde tanto los clones como los androides enemigos van cambiando a lo largo de las películas. ¿Evolución? No, porque tampoco responde a nada lógico (como lo que digo del camuflaje): simplemente era para vender muñequitos nuevos.
Es algo en lo que también ha picado Abrams, aparentemente. No sé qué puede haberle llevado a cambiar de forma tan sutil los diseños de los stormtroopers. ¡Para cambiarlos tan poco mejor haber mantenido los originales! Sólo puedo pensar que responde a marketing, para que una vez más, niños y coleccionistas vuelvan a dejarse los dineros.
En definitiva (como diría aquel :-p ), que esta película es salvable, es muy entretenida, pero ya empieza a acusar que Lucas estaba más pendiente de vender muñecos nuevos que de contar una historia coherente. ¿Ositos de peluche lanzando flechas contra soldados armados y acorazados? ¿De verdad?
borruey
Mucho criticar la segunda trilogía pero parece que la gente se olvida de esta. El episodio IV y V son magníficos, pero aquí se echa buena parte del trabajo hecho por tierra. Ya no es sólo cosa de los malditos Ewoks (que también), es que a nivel de guión prácticamente jode la trilogía: en el Imperio... se deja claro que Luke debe entrar, pero aquí lo pasan por alto y ya parece un Dios jedi, Darth Vader de repente tiene muchas dudas acerca de los sith y siente mucha simpatía por su hijo (el giro final tiene tela), de repente el hermano perdido es nada menos que Leia (y Luke dice que ya lo sabía... tócate las narices!), Yoda de repente está viejo y mure sin más,... y seguro que me dejo más cosas.
En su momento los guionistas dijeron que tenían pensado hacer hasta el Episodio IX, pero Lucas quería terminar en el VI y tuvo que atar cabos como humanamente pudo. Ni entrenamiento ni nada, pa'qué.
¿Es una mala película? Desde luego que no, pero podría haber sido un cierre BRUTAL a una de las trilogías más magníficas que se han hecho y acaba prácticamente nada. Aún con sus errores me quedo sin duda alguna con el Episodio III.
abraxas21
Yo es que nunca pude con los ositos de los cojones esos....
Usuario desactivado
Al contrario de mucha gente, a mí lo que me sedujo de esta película fueron... ¡los ewoks! (no tenía más de 7 años, creo). Evidentemente no defenderé que sea lo más brillante del guión, pero sí que encaja, bajo mi punto de vista, con esa sensibilidad infantil de Lucas que contrasta con momentos más oscuros (visto ahora, Leia de esclava sexual de un gusano gigante me parece muy heavy xD), y que hace parte de la imperfección y el encanto que tiene, a mi modo de ver, esta saga en su conjunto.
maximmarquescolon
Un fallo de la historia es que Leia le comenta a Luke que recuerda a su madre y esta (Padme) se supone que muere en Episodio III nada más da a luz.
cinepf5
Sergio ahora que ya has terminado con el de Star Wars, ¿por qué no haces de adaptaciones de videojuegos en el cine?
multifilm
Un cierre más que digno con otros tantos giros que no superan el descubrimiento de la relación padre-hijo, pero que si termina de enmarcar un universo fascinante para todas las generaciones venideras !
Chicaro
Los ewoks no son, ni de lejos, tan ridículos y brutos como Jar Jar Binks. Que sí, que no sé que pensaban en meterlos en lugar de muchos chewies, pero al menos estos tienen carisma.
Lo malo con esta película es que tenía que haber "reinventado" en su propia forma las historias fantásticas y de aventuras, tal y como lo hicieron las dos anteriores, para llenar las expectativas de los fanáticos. Pero no fue así, y solo se limitó a darle final a la historia. Lástima porque de haber cambiado algunas cosas y enfocarse en otras hubiera dado un cierre perfecto.
A pesar de eso la película no es mala en lo absoluto, pero le pesa que es continuación de El Imperio Contraataca. Al menos yo la puedo seguir viendo y disfrutándola gracias a sus grandes secuencias memorables. Ya quisieran las precuelas con todo su CGI tener una batalla como la del ataque a la segunda Estrella de la Muerte.
guille22496
A mi los Ewoks me gustan bastante. Su problema es que están fuera de lugar y tienen el peso equivocado en la historia, pero las criaturas en sí están muy bien.
alpasgui
Aunque hubiese estado mejor otro final que el volver a construir otra estrella de la Muerte. En este final, la destrucción y las flaquezas de la misma están más justificadas debido a que todavía está en construcción, por tanto todo el plan para acabar con ella tiene mucha más fuerza que "una simple obertura de 2 metros".
Los tres climax paralelos están magistralmente montados y esa lucha de espadas láser supera a cualquier lucha acrobática de las secuelas (por detrás de la del "Imperio..")
Usuario desactivado
Tenía 7 años cuando mi madre me llevó a verla al cine. Fue la experiencia cinematográfica más increíble que he tenido en mi vida. Tendrá sus fallos pero a mi me encanta: ewoks, sables láser, Han y Leia, Luke, la batalla final, la pirueta de Luke en el trampolín (flipé con esa escena).
Pagaría un dineral por volver a disfrutar de ver una película como hice con El retorno del Jedi cuando era pequeño.
Marce90
A mi los Ewoks no me desagradan tanto, es más, justifico su existencia, el problema es que les dieron demasiada importancia.
brown_brown
No se si es una dificultad intrinseca de el arte de contar historias, cine, libros, videojuegos (si, si, los meto en el mismo saco), que hace que muy a menudo la conclusion de una historia sea menor que su segundo acto. Llevo años años con pequeñas o grandes decepciones en historias que prometian mucho en su desarrollo y que el final, por unas cosas u otras nunca esta a la altura. Eso le pasa al Retorno del Jedi, es complicado que despues de conseguir una obra maestra como el Imperio contraataca remates la faena a la altura, una lastima.
Dicho esto tengo que reivindicar el Retorno del Jedi, que es una peli entretenidisima, con momentos memorables, y con la mejor lucha de sables laser de todas las peliculas, y si me apuras, de esgrima en el cine -la del ep1 es espectacular, pero tiene menos sentimiento que una cerveza sin alcohol-. Y los 3 finales con un montaje y ritmo impecable.
Cosas mejorables, si claro, los ewoks son demasiado achuchables para tomartelos en serio, pero tambien lo es un mapache, hasta que te enseña los dientes y acojona. Si se hubiese tomado ese enfoque otro gallo cantaria, pero lo hecho, hecho esta. Y la estrella de la muerte 2, otra pifia. Vaya por dios George, un poco obvio ¿no? un Coruscant lo hubiese petado.
Y el "desenmascaramiento" de Vader, que esta hecho con un gusto extraordinario.
Buena pelicula, segunda en mi ranking personal
Pinaker
“¡Jamás! yo soy un Jedi, como mi padre antes que yo….”
franky93
Película más que digna para el cierre de la trilogía. Pero eso sí, siendo la más irregular de las 3. Tiene escenas geniales como la batalla espacial o las escenas entre Vader, Luke y el Emperador. Pero tiene otros fallos impropios de los episodios pasados como bien se ha señalado. Toda esa rocambolesco y extraño para rescatar a Solo, o el dejar en tan segundo plano a Leia y Han y a R2 y C3PO. Y luego los Ewoks claro, para mí su problema no es que resulten molestos, en ningún momento me lo parecieron como sí me lo parece Jar Jar. Su problema es que no te los crees, no te crees que unos osos de peluche resulten ser decisivos contra un regimiento de soldados imperiales por conocer el terreno y emboscarlos con troncos y armas de piedra. Además de infantilizar innecesariamente la película y ser una maniobra descarada de merchandising por parte de Lucas después de saber que inicialmente iban a ser los wookies los que aparecían en el Retorno del Jedi.
morlock
¿En algún momento de la película se dice algo de cuánto tiempo ha pasado entre el episodio V y el episodio VI? Yo es que muchas de las cosas que se mencionan como fallos por ahí nunca los consideré como tales porque en mi cabeza entre uno y otro habrían pasado, qué sé yo, como seis años. Por eso todos parecen haber madurado y crecido (y al imperio le ha dado tiempo a construir otra estrella de la muerte). Supongo que Luke se entrenaría por ahí durante todo ese tiempo, por ejemplo.
danigarcia78
Que si, que habría molado mucho más si en vez de ewoks hubieran puesto wookies. Pero pensandolo bien, tiene más lógica poner un generador de escudo en un planeta en principio habitado por criaturas indefensas que por bestias pardas de las que te arrancan la cabeza de un tortazo. Por otro lado los ositos de peluche resultan ser unos cabrones belicosos que se aprovechan de su aspecto para poner en jaque a las tropas imperiales. Y molan más que Jar Jar, pero mucho más.
CarlosAMG
Lucas era tan consciente de lo poco que gustaban lo sEwoks que unos años mas tarde en el juego de pc "Star wars galactic battlegrounds" que usaba personajes de la trilogia original y del episodio I,el personaje mas poderoso (solo con trucos)era "Simon el Ewok asesino" practicamente invencible.xDD