Después del, podríamos llamar, incidente causado por la marcha de la serie de Netflix en vísperas de su regreso, esta noche a las 21:00 podremos ver gratuitamente en el canal SciFi de Pluto TV, los dos primeros episodios de la temporada 4 de 'Star Trek: Discovery'.
Eso sí, casi a modo de homenaje de las series clásicas, solo podremos verlo en directo y doblado al castellano, por lo menos en España. Quitando este regreso a la época de la televisión lineal —como plataforma me parece muy interesante, pero estas cosas echan mucho para atrás— reconozco que tenía muchas ganas de este regreso... y la espera vale la pena.
Pero es extraño entrar en los nuevos episodios de 'Star Trek: Discovery' porque el trío formado por Alex Kurtzman, Michelle Paradise y Jenny Lumet tienen la labor de hacer un nuevo comienzo para la serie después de que la temporada 3 cierre un mega arco. Y, en este sentido, el meternos en el puente comandado (esta vez sí) por la Capitana Burnham (Sonequa Martin-Green) es intrigante y algo desorientador.
Un comienzo más ligero que de costumbre
Poniendo un ejemplo y sin ser una queja: la ligera secuencia con la que abre la temporada —en la que vemos a Book y Burnham de misión de primer contacto que sale torcida— parece más propia de 'The Orville' (o de 'Star Trek: En la oscuridad') que de la saga en sí. Esto sobrepasa algo la tendencia a ser más "trekkie" que observamos en la temporada 3.
Algo que se observa bien en el puente, donde vemos que a la tripulación le ha venido bien estos meses de misiones rutinarias. Evidentemente, esta aparente tranquilidad de los primeros minutos se verá interrumpida por la presentación de la gran amenaza a la que la nave (y la Federación) se enfrentará. Una anomalía de años luz de ancho que embiste todo lo que se encuentra y que es capaz de sacar a planetas de su órbita y destruirlos.
Esto pondrá a prueba a toda la tripulación, que se verá en grave peligro proporcionándonos algunas de las escenas más trepidantes que hemos visto en mucho tiempo en la saga de ciencia ficción. Nos da una buena dosis de más que bienvenida acción y misterio en torno a esta amenaza desconocida e impredecible.
Aquí los guionistas hacen un gran trabajo para equilibrar estos momentos de grave peligro mientras siguen explorando los lazos personales y el lado más íntimo de los personajes, con sus dudas y sus propias crisis existenciales. Al igual que se permiten reflexionar sobre el papel del héroe de acción vs. el de un capitán.
Pero por mucho que desarrollen los personajes, no todo funciona en estos primeros episodios. Mismamente la subtrama de Adira (Blu del Barrio), personaje que ha sido algo potenciado con su incorporación como alférez, con su novio Gray (Ian Alexander) es perezosa y más pesada de lo que debería.
En definitiva, a pesar de ciertas descompensaciones, la temporada 4 de 'Star Trek: Discovery' es un arranque con bastante buen pie. La ficción se nota bastante cómoda en este rico universo ultrafuturo por explorar y, en este sentido, seguimos teniendo una dosis efectiva y ligera de ciencia ficción. Veremos cómo continúa, pero de momento yo sigo a bordo.
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