En una escena de 'Si de verdad quieres...' ('Hope Springs', David Frankel, 2012) el personaje de Meryl Streep acude a un bar para ahogar sus penas en copas de vino blanco. Cuando lleva unas cuantas y se encuentra más relajada, confiesa a la camarera --interpretada por una desaprovechada Elizabeth Sue que parece mejorar con la edad--, que el gran problema es que su marido y ella ya no tienen relaciones sexuales.
La otra se ríe ("¿¿Eso es todo??") y pregunta en voz alta cuántos de los allí presentes no están teniendo sexo. Bastantes manos se alzan...
A veces ojeo revistas de divulgación y más de una vez he encontrado artículos dedicados a quitar relevancia al sexo, a buscar maneras de evitar que se convierta en una obsesión o una fuente de conflictos para la pareja. Sin embargo, la publicidad --chicas lavándose el pelo como si se estuvieran masturbando--, las series de televisión --estás viendo una historia sobre la locura del terrorismo y te cuelan un polvo totalmente gratuito-- o las tiendas de ropa --enormes carteles de modelos en ropa interior luciendo curvas--, por poner unos ejemplos, empujan a la sociedad en otra dirección; normal que pueda ser causa de inseguridad y frustración. Pero la crisis que atraviesan Kay (Streep) y Arnold (Tommy Lee Jones) es más complicada. Siempre lo es.

No es solo que hayan dejado de acostarse juntos --y no es una expresión, duermen en habitaciones diferentes--, es que no se tocan, no se besan y no intercambian gestos de cariño. Llevan casados más de treinta años y a ojos de los demás forman un matrimonio perfecto, pero con el paso del tiempo se han convertido en dos extraños que viven bajo el mismo techo. Cada uno sigue su rutina, al margen del otro y prácticamente lo único que hacen juntos es comer. Han dejado de comunicarse, todo se reduce a hablar sobre algo del trabajo y el otro hace como que escucha. Triste, y muy común.
'Si de verdad quieres...' no se anda por las ramas, es un producto norteamericano de cabo a rabo así que lo último que cabe esperar es sutileza y complejidad; todo es simple y directo. En la primera escena, Kay entra con evidentes intenciones en el dormitorio de Arnold, pero él no suelta lo que está leyendo y dice que no se encuentra bien, por lo que la mujer se vuelve a su habitación. Otra noche, durante una cena con los hijos, Kay revela que por su 31º aniversario de casados se han regalado una suscripción a un canal de televisión por cable. Y cada mañana, Arnold entra en la cocina, desayuna leyendo el periódico y se marcha al trabajo sin mirar a su esposa. La mujer se asfixia en la monotonía de una relación que es una jaula, incapaz de entender cómo se ha convertido en poco menos que una sirvienta.
Pero a diferencia de muchas mujeres chapadas a la antigua que aceptan las cartas que les han tocado (porque así es la vida o así es el matrimonio o las personas no cambian o cualquier otra bobada), Kay reacciona y al verse incapaz de desplazar la relación hacia una zona más saludable, busca ayuda, encontrando un libro escrito por un terapeuta de éxito que trata a matrimonios con problemas en una tranquila localidad llamada Hope Springs. Arnold considera la idea una completa y cara estupidez pero por complacer a su esposa accede a viajar hasta ese pueblo y visitar al especialista --a quien encarna un contenido Steve Carell--. Ahí, en el desmenuzamiento de la relación, comienza el tramo más interesante de la película, con unos convincentes Streep y Jones exprimiendo las posibilidades de sus personajes.
Lamentablemente, el guion de Vanessa Taylor carece del rigor y la complejidad de la serie 'En terapia' ('In Treatment', 2008-2011) --aunque Frankel filma la película como si fuera televisión-- y lo que a veces apunta a crudo retrato de un veterano matrimonio acaba por quedarse en lo cómodo, una comedia ligera y superficial que solo coquetea con el drama, destinada a entretener a un público que solo desea pasar un rato agradable delante de la pantalla, que demanda una solución feliz del conflicto --aunque sea de manera simplona y contradictoria-- en lugar de ser inquietado con la posibilidad de que quizá lo mejor que puede hacer una pareja es separarse y buscar algo mejor, algo que les haga sonreír cada mañana, antes de salir a "la selva". Que los años van pasando y no tenemos otra vida...


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15 comentarios
lunares
¿Dos estrellas y media? Para mí le sobran dos.
Cuando la estaba viendo no me podía explicar cómo dos actores de la talla de Meryl Street y Tommy Lee Jones, se habían prestado a protagonizar semejante bodrio. No sólo porque las situaciones fueran tontas, sino porque además tenía unos diálogos súper aburridos y unas situaciones increíbles y absurdas, sin chispa ninguna en ningún momento de la película. Meryl Street aparece mucho mayor de lo que la solemos ver, sin maquillar, con un pelaje horroroso y con un vestuario que le quedaba fatal. A Tommy Lee J. le ocurría tres veces de lo mismo, pero el traje de chaqueta disimula más. Tan mala me pareció que decidí olvidarla, entre otras cosas por la gran decepción de esos dos grandes actores, y hasta ahora que vuelvo a leer sobre ella "destinada a entretener a un público que sólo desea pasar un rato agradable..." ¡Qué va, nada de nada! ¡Un desperdicio!
azul
No la vi cuando se estrenó porque el tráiler no me atraía demasiado. Me parecía una comedia basada en tópicos y lugares comunes aunque la presencia de dos grandes actores como Meryl Streep y Tommy Lee Jones me hacía dudar. Después de leer tu crítica, quizás la vea.
En cuanto al "final feliz" es obligado en una comedia de estas características, por muy absurdo o contradictorio que parezca con la historia que nos han contado. Es una limitación autoimpuesta por el cine norteamericano.
beatrizlume
" en lugar de ser inquietado con la posibilidad de que quizá lo mejor que puede hacer una pareja es separarse y buscar algo mejor, algo que les haga sonreír cada mañana, antes de salir a “la selva”. Que los años van pasando y no tenemos otra vida…"
¿Entonces al final se separan?
master cat
A mi tambien me pareció una pelicula interesante, lo que no me gustó en absoluto fue el final, demasiado típco y arreglándolo todo en un momento con las mismas cosas que se echa en cara al principio de la pelicula! En fin, entretenida, unos actorazos, pero no me convence en su totalidad
Caith_Sith
Qué Caviaro, ¿no te está gustando la T2 de Homeland? :)
ivo.stoyanov.37
Ami me gusto quitando el final,como bien has dicho es contradictorio y falso...
shakemeatall
HORRIPILANTE
qk
Sabe alguien el título de la canción que suena cuando Meryl Streep está en la librería al principio de la película? Me encanta!! Gracias
ropainterior
A mi no me ha gustado nada, alguna escena en ropa interior, otras un poco divertidas, pero en definitiva nada de nada.
luismendieta
De lo peorsito de este año, en realidad tampoco me explico como Lee Jones y Street se prestaron para hacer esto y un Steve Carrel que aporta 0 a una trama de 0.