A primera vista, podría esperarse una película con poca sustancia, mucha sangre y que acabase siendo un fracaso. Pero su osadía, atrevimiento, irreverencia y, sobre todo, el saber reirse de sí misma, la convierten en toda una sorpresa en la cartelera. Un comedia delirante, que camina entre el thriller y el más clásico cine de terror, y que da un vuelco a la mera parodia para convertirse en una cinta de cine sin etiquetas.
Sin etiquetas, porque las rompe todas, porque va más allá de ser un cúmulo de diversos homenajes, de clichés, de personajes y lugares ya conocidos, para sacar la sonrisa (en ocasiones la carcajada) al espectador en forma de gamberrada friki. Nada más, aunque no es poco hoy en día.
'Sexykiller' es una sátira mordaz, que funciona a ratos, a pesar de sus evidentes limitaciones, porque sabe asumir su rol de homenaje al cine de terror (o más bien al cine que parodia al cine de terror) pero desprendida de cualquier parecido razonable. Su originalidad estriba en tomarse todo a risa y hacerlo con profunda sinceridad.
Su protagonista, la cordobesa Macarena Gómez parece la actriz ideal en ese papel de barbie psicópata, y demuestra su talento cómico, siendo el pilar básico de la película. Y es que el personaje de Bárbara está perfectamente dibujado en el divertido guión y a cada aparición la historia avanza y discurre por el buen camino. Su protagonista enamora, atrae pero también repulsa. Es un papel que no deja indiferente y eso es un logro.
Macarena, secundada por un puñado de actores muy populares por la televisión (destacando César Camino como necesaria réplica de la alocada protagonista), nos cuenta sus impresiones, gustos y su método asesino (en plan videoclip), reivindicando su femineidad para romper los moldes de los asesinos en serie. Aspecto éste que es lo menos destacable para quien firma esta crítica.
La narración de la historia a cargo de Miguel Martí tiene altibajos, y peca de pobreza en algún pasaje, pero logra remontar y brillar cuando de verdad deja de esconder sus cartas. Cuando, ya mediado el metraje comienza a disparatarse locamente, a preparar un desenlace brillante, con un giro sorprendente e ingenioso.
Muchas son las referencias obvias que pueblan la historia, de hecho todo aparenta ser un homenaje al género cultivado (y devorado por su guionista Paco Cabezas) de George A. Romero (el nombre de la Universidad donde se ambienta), de Wes Craven, de Sam Raimi incluso de Roger Corman. Pero imitando esos clichés del cine de terror, sabe aprovechar la comicidad al máximo y nos brinda un slasher divertido de digestión fácil.
'Sexykiller' es una isla inhóspita en la cinematografía española, que imita a algunas deplorables y manidas cintas americanas (del tipo 'Scream' y similares), pero lo hace con mucha más gracia, arriesgando y con una protagonista brillante. Esperemos que Martí y Cabezas sigan brindádonos momentos de cine tan inspirado.
Otra crítica en Blogdecine: * 'Sexykiller, morirás por ella', homenaje al olvido
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