Desde 1998 Vincent Ward no se había puesto tras las cámaras para dirigir una película, concretamente desde que realizó la flojísima 'Más Allá de los Sueños', basada en la obra del gran Richard Matheson, y que ganó un merecido Oscar a los efectos visuales. Antes de aquello se dió a conocer con 'Navigator, una Odisea en el Tiempo', interesante, pero fallido film fantástico. En ambas película, Ward dejaba bien claro su estilo, basado sobre todo en una fuerza visual inusitada, pero las películas no tenían alma, y no pasaban de ser experimentos visuales arrebatadores en lo visual, que engullía sin compasión la historia, y descuidando enormemente los personajes.
Años después, la cosa no ha cambiado ni lo más mínimo con 'River Queen', film realizado en el 2005, y que hace unas semanas llegó a nuestras pantallas (sin comentarios) con más pena que gloria, porque me temo que no la ha visto demasiada gente, gracias como siempre a la "extraordinaria" distribución que está sufriendo el film. La historia está ambientada en 1860 en Nueva Zelanda, durante la colonización inglesa, y los maoríes del lugar luchaban encarnecidamente contra las tropas inglesas. Allí, una mujer irlandesa se enamorará de un maorí, con el cual tendrá un hijo, que será raptado por el abuelo.
La película tiene escenas absolutamente preciosas, de una belleza sin igual, con un extraordinario uso del color y la iluminación, todo muy típico de Ward. Además, aquí tiene el apoyo de la banda sonora, compuesta para la ocasión por Karl Jenkins, un genio en lo que se refiere a las mezclas corales. La música acompaña a cada imagen de cada plano o secuencia, en perfecta armonía con lo que se ve. Es fácil quedarse atontado mirando para la película, y casi se podría caer en trance. Pero de ahí no pasa el asunto. La historia, sin demasiadas complicaciones, requería, y lo cierto es que lo pide a gritos, algo más de vitalidad, de épica, una épica que refleja la música, o alguna de sus imágenes, pero no el guión. Ward, una vez más se preocupa de lo visual, de crear el plano perfecto, y se olvida de todo lo demás.
Los actores están más que correctos, aunque en el caso de Samantha Morton, da la sensación de que anda un poco perdida, como si estuviera fuera de lugar, quizá por la poca definición del personaje, demasiado lineal. A su lado tenemos a un Stephen Rea bastante esporádico debido a su brevísimo papel, como padre del personaje central, que desaparece de la función porque sí. Kiefer Sutherland, en un descanso de la trepidante '24', como soldado valiente y de buen corazón, pero con el mismo problema que el personaje de Morton, poca definición, y hay momentos en los que parece que estemos viendo a Jack Bauer con falda escocesa. Y por último Cliff Curtis, convincente en su papel, y quizá el mejor parado de todos.
Una floja película que podría haber sido una gran obra, la misma sensación que producen los films de Ward antes mencionados, películas que se quedan en poca cosa, por centrarse demasiado en los aspectos visuales, o simplemente por no saber dedicarse a todos los demás elementos de la película. Una vez más, Ward consigue que el espectador se lamente, pues la historia tiene unas enormes posibilidades, y todas son desaprovechadas. De Ward siempre me quedará la duda de qué podría haber hecho con el tremendo material que tenía para 'Alien 3', y que al final no pudo ver la luz, algo sobre lo que podréis saber más cosas en los excelentes extras en el dvd del director´s cut de David Fincher de la mencionada película, por cierto, infinitamente superior al horror que vimos en cines.
En Blogdecine | Tráiler, póster y página web de 'River Queen', de Vincent Ward.