De todos los héroes de acción que han pasado por delante de nuestras retinas en las dos últimas décadas Jason Statham me parece el que mayor carisma posee. Un actor que sustituye sus limitadas capacidades dramáticas por estilo y presencia. Uno de esos tipos duros surgidos como resultado de la evolución a partir de estrellas setenteras cuyos nombres no hace falta citar. En otras palabras, Jason Statham es un tío que cae bien cuando aparece en pantalla, ya sea en productos de dudosa credibilidad o intentos de hacer algo más, como el presente ‘Redención’ (‘Hummingbird’, Steven Knight, 2012).
Se trata de la ópera prima de Knight, cuyo mayor logro en su currículum es el haber escrito el libreto de ‘Promesas del este’ (‘Eastern Promises’, David Cronenberg, 2007). Una de las máximas en los guiones de Knight suelen ser personajes abocados a un destino del que no pueden escapar, buscando en cierto modo una redención. El personaje de Statham entra de lleno en ese universo, y el resultado es un producto a ratos atípico, a ratos muy típico, que no narra nada nuevo, pero entretiene lo suficiente.
Jason Statham da vida a un ex-militar retirado, y que ahora vive en Londres ganándose la vida de forma no muy legal. En sus fantasmas habita el sentimiento de culpa por un terrible hecho acaecido en el pasado, durante la guerra y ahora intenta purgar su culpa haciendo buenas obras con el dinero que consigue de forma ilegal. En sus andanzas, mientras huye del gobierno y se junta con gente non grata, llegará a entablar amistad con una monja que le ve con otros ojos.
Quien mucho abarca...
‘Redención’ intenta tocar muchos palos. Por un lado tenemos la historia de redención que el título español indica, y que en el original tiene que ver con los colibrís que le recuerdan a Joey (Statham) lo acaecido en la guerra. Por otro el típico film de acción en el que el actor hace gala de su estilazo dando golpes, patadas y demás hostias variadas. También hay una crítica a lo militar, el punto menos comprometido del relato. Un drama sobre la inmigración, con algún instante duro. Y por último, lo más delirante: la historia entre Joey y la monja.
Es este personaje uno de los puntos fuertes del relato desde varios puntos de vista. Por un lado hablamos de una monja que semeja ser en ciertos momentos un ángel de la guarda para el protagonista, para en otros ser una especie de tentación, otro pecado más que sumar a la agenda. Que esto suceda en un film al completo servicio de alguien como Jason Statham no deja de tener su gracia, incluso el film alcanza momentos algo vergonzosos al respecto. Somos seres humanos, no almas que buscan el perdón.
En cualquier caso ‘Redención’ está dirigida con cierto brío. Knight se ha ocupado más del libreto, en el que ha intentado dejarlo todo absolutamente cerrado, dando la sensación de querer contentar a todo tipo de espectadores, y fracasando en buena parte con ello. Afortunadamente, la puesta en escena, aquello en lo que se estrena Knight, llega para ofrecer un film que se ve con cierto agrado, e incluso sus fallos pueden enfocarse con cierto sentido del humor. Eso, si no queremos tomarnos las cosas en serio. Si no, la cosa no funciona, por mucho final chulo que tenga. ¿Quién será capaz de ofrecer al actor un producto digno de su carisma? Roger Donaldson casi lo logra hace unos años.
Ver 22 comentarios