'Public Enemy', thriller ameno y divertido

Los domingos se hicieron para descansar, o eso dicen. Normalmente yo me voy de juerga por ahí, ya que es el día de la semana que descanso de mis ocupaciones laborales. Sin embargo, este pasado domingo decidí hacer lo que hacía hace tiempo cuando mis obligaciones era muchas menos de las que ahora tengo: irme al videoclub y alquilarme un par de películas para verlas tirado en el sofá en buena compañía, tanto humana como animal. Como ya dije en alguna ocasión ya no tengo paciencia para pasarme media hora en el videoclub intentado encontrar una película, asi que esta vez serían las dos primeras que no hubiera visto. 'Public Enemy' fue una de ellas, y lo cierto es que me llamó la atención por ser un thriller y por tratarse de un film coreano, y qué coño, porque me apetecía arriesgarme con una película sobre la que no supiera nada, o casi.

'Public Enemy' se sitúa dentro del género del thriller. Su historia sigue a un policía no muy honesto y que últimamente no ha hecho demasiadas detenciones, por lo cual es reprendido por su jefe e investigado por asuntos internos. Una noche en medio de una investigación se enfrenta a alguien desconocido que intenta matarle clavándole un gran cuchillo. Dicha arma es la misma que se ha usado en un brutal asesinato. A partir de ese momento dará comienzo una persecución implacable entre el policía y el asesino.

Lo más curioso de esta cinta es que tratándose de un thriller, éste tiene lugar también para algunos puntos cómicos de lo más ingeniosos y excelentemente metidos en la trama probablemente para que el espectador descanse un poco, ya que hay algunos pasajes de la historia que son bastante duros. Que conste que no nos encontramos ante uno de esos dramones donde todo le sale mal al protagonista. Me refiero concretamente a la figura del villano, el cual comete verdaderas brutalidades, y sus motivaciones son realmente terribles. Un personaje fascinante que tal vez está un poco desaprovechado. Todo lo horrible que este personaje nos pueda parecer contrasta con los momentos graciosos que protagoniza el protagonista principal.

Y si el villano del relato está un pelín desaprovechado es porque la película se centra demasiado en el papel del policía, un personaje entre simpático, perdedor, honrado e incluso todo lo contrario. Dicho personaje está extraordinariamente interpretado por Sol Kyung-gu, que al lado de Lee Sung-jae ofrecen un verdadero recital de actuaciones. Ambos actores están fantásticos compenetrándose a la perfección interpretando a dos personajes enfrentados, antagonistas sin cuartel en un duelo muy efectivamente narrado.

Kang Woo-suk dirige con ritmo y precisión, aunque hay que decir que el film quizá pierda un poco de tiempo en presentarnos a los dos personajes principales: unos 40 minutos para que los conozcamos más o menos bien, y que a mi juicio es demasiado tiempo. No obstante, el film no aburre en ningún momento y a la hora de película ésta da un subidón tremendo. Las pocas escenas de acción que hay están muy bien narradas y sin demasiadas exageraciones. Woo-suk acierta con su puesta en escena y utiliza muy bien el formato scope, no como otros que simplemente lo usan porque es espectacular.

Una buena película entretenidísima y llena de buenos momentos. Id corriendo al videoclub más próximo y alquiladla (también hay otros métodos). Pasareis un buen rato y anotad el nombre de su director, ya que tiene bastante éxito en su país. Esta película tiene su continuación en una segunda parte que por supuesto pienso verme, y el director ha triunfado recientemente con el superéxito taquillero de su último film.

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