'Novia por Contrato', el amor no se compra

Las comedias románticas americanas suelen estar cortadas todas por el mismo patrón. De hecho hasta da la sensación que desde hace más de 20 años es el mismo guionista para todas ellas. Si el otro día me quejaba de que las películas asiáticas de terror eran muy parecidas, hoy lo hago de este tipo de films, que son todavía mucho más parecidos entre sí. Y además no les llega con hacer una historia que raya la cursilería, o la sobrepasa, y con un montón de convencionalismos, no. Además suelen elegir a actores no demasiado brillantes, aunque cumplan con su papel, y a directores que no tienen la más mínima personalidad. Dicen que la comedia es un género difícil, como sigan bajando tanto el listón se va a convertir en el más fácil de realizar para cualquiera. Ay, qué lejos quedan los tiempos de Lubitsch o Sturges.

Tripp es un joven de 35 años que todavía vive con sus padres, dándose la vida padre, valga la redundancia. Éstos le quieren mucho pero piensan que ya es hora de que abandonde el nido y haga su propia vida. Como ven que todas las mujeres que conoce huyen despavoridas en cuanto descubren que todavía vive con sus padres, deciden contratar los servicios de una chica para que se camele a su hijo, lo enamore y así de esta forma, se independice ¿No veis un enorme fallo en esta técnica? Vale, en las películas todo puede pasar pero...¿una mujer que se dedica a ir enamorando a hombres para que éstos abandonen a sus padres? En manos de un director genial sería hasta enormemente divertido, pero Tom Dey no entra precisamente en esa categoría, por lo que no es capaz de disfrazarnos las deficiencias de su planteamiento.

La película sigue todos los caminos previsibles que se puedan conocer. Prácticamente no hay nada que nos sorprenda, y ya sabemos de antemano cómo van a terminar las cosas para todos los personajes. Personajes por otro lado tópicos: el chico guapo y de buen corazón, con un par de amigos que aunque son unos vividores de cuidado tienen alguna cualidad que los hace extraordinarios. La chica guapa (bueno, es un decir) que en principio se resiste a los encantos del protagonista, y que tiene una amiga que es muy rara. La pareja de padres que con muchos años de relación a cuestas aún se aman apasionadamente. Incluso hay un animal "simpático", por decirlo de algún modo.

Matthew McConagheuy y Sarah Jessica Parker interpretan a los dos protagonistas, y están como otras tantas veces, realizando el mismo tipo de papel que los hizo famosos. Bueno, considero que el primero empezó su carrera muy aceptablemente y luego fue bajando la calidad tanto de los films en los que intervenía como de sus interpretaciones. Aquí no pueden hacer demasiado con unos personajes simplistas y planos al servicio de un guión más simplista y más plano, rodado sin ninguna pasión por su director.

Hay algún momento bueno, como cierta escena con un pájaro, que se sale de la tónica general de la película y que provoca carcajada por lo surrealista que es. También habría que destacar el trabajo de Zooey Deschanel, como la mejor amiga de la protagonista. Su personaje es el mejor de todos, una chica rara y extravagante que produce cierta fascinación y morbo, aunque al final cae en concesiones, supongo que para no defraudar al personal.

Una película muy floja en la que se salvan muy pocas cosas. A nadie le sorprenden sus resultados. La sorpresa hubiera sido que hubieran hecho algo bueno con semejante material, en el que además se establece una doble moral realmente fastidiosa y chirriante.

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