Las precuelas son un recurso que los productores de Hollywood aún no han explotado a fondo a la hora de intentar dar nuevas energías a algunas de sus franquicias más exitosas. Eso ya está cambiando y estoy convencido de que va a ir más durante los próximos años, por lo que sólo nos queda esperar que al menos algunas de esas precuelas merezcan la pena. Lo que no tengo muy claro es que alguna de ellas vaya a superar o al menos estar al nivel de 'Indiana Jones y el templo maldito' (Indiana Jones and the Temple of Doom), mi precuela favorita.
Lo cierto es que no tenía demasiada confianza en 'Los Minions', ya que me costaba creer que las simpáticas criaturas amarillas que aparecieron por primera vez en 'Gru, mi villano favorito' (Despicable Me) fueran a ser capaces de liderar su propia película sin que acabasen saturando al espectador. He de confesar que me equivocaba, ya que 'Los Minions' es una muy entretenida precuela que supera holgadamente al original para convertirse en la mejor película de la saga con amplia diferencia.
'Los Minions', la diversión por encima de todo
Recuerdo que las dos primeras entregas de la saga tienen millones de fans a lo largo de todo el planeta, pero no me olvido de que también cuenta con unos cuantos detractores que se quejan sobre todo de su toque de moralina. Pues bien, en 'Los Minions' ya podéis ir olvidándoos de este último aspecto, pues estamos ante una película en la que la diversión prima por encima de todo, lo cual hace que tenga un ritmo ágil que nunca decae muy bien aliñado por un aluvión de gags, tanto verbales como, sobre todo, visuales, que funcionan en su mayoría sinllegar a ser hilarantes.
'Los Minions' apuesta sobre todo por un humor slapstick -geniales todos los gags a costa de la incapacidad de los minions para mantener a sus nuevos amos- que recuerda a varios cortometrajes animados clásicos en una especie de versión gigantesca que a priori parecía condenada a no funcionar. Es ahí donde conviene destacar la importancia del guión de Brian Lynch, ya que su apuesta podría haberse desequilibrado con una facilidad asombrosa y él sabe cuándo hay que cambiar de escenario y volver con el resto de minions o en qué momentos el humor tiene que ser casi constante o espaciarse un poco.
Una de las consecuencias de las decisiones tomadas por Lynch es que tampoco hay mucha oportunidad para profundizar en los nuevos personajes, pero 'Los Minions' nunca llega a resentirse por ello, ya que el tono ligero que consiguen Kyle Balda y Pierre Coffin hace que todo fluya con naturalidad. De hecho, el error habría sido pararse más de la cuenta en algunos episodios como el de la familia que recoge a los tres protagonistas. Cierto es que Scarlett y Herb Overkill podrían haber dado algo más de sí a nivel individual, pero esta no es su película y su aportación, en especial la de él, es tan adecuada como efectiva.
Un entretenimiento ligero
Una cosa que hay que tener muy clara con 'Los Minions' es que no es una película que juega en la misma liga de Pixar -deseando estoy ver su nuevo trabajo tras el año sabático que se vieron obligados a tomarse por todos los problemas con 'The Good Dinosaur'- y tampoco es una precuela que ofrezca grandes novedades sobre el pasado de los Minions, ya que todo lo relacionado con eso se podría haber resuelto perfectamente a través de un cortometraje. Donde sí triunfa es en conseguir diferenciar lo suficiente a sus tres protagonistas para que no sean intercambiables entre sí.
La cuestión es que 'Los Minions' es una película amable que echa mano de esa violencia que en ningún momento afecta a los protagonistas y lo hace desde un enfoque ligero pero respetuoso. Las salidas de tono, que las hay, están perfectamente medidas para que todo funcione como un perfecto mecanismo de relojería que no tiene como objetivo ser una genialidad o trascender más allá de su naturaleza como “simple” divertimento. No veo nada de malo en saber lo que eres y tus limitaciones si luego rayas a tan gran nivel en ello.
En definitiva, 'Los Minions' es una película muy entretenida y con un ritmo ágil en el que lo que realmente importa es ofrecer diversión al espectador -y ahí triunfa de forma indiscutible-, prescindiendo así de la moralina que tanto peso tenía en las dos entregas de 'Gru, mi villano favorito' a las que supera con holgura. De hecho, no me extrañaría lo más mínimo que los que no disfrutasen con aquellas sí lo hagan con esta precuela.
Ver todos los comentarios en https://www.espinof.com
VER 20 Comentarios