Recordando un poco el año pasado, uno magnífico para las series, creo que una de las que más posó dejó en mi corazón fue, sin duda, la primera temporada de 'Killing Eve', una magnífica aproximación al género del ratón y el gato protagonizados por unas soberbias Jodie Comer y Sandra Oh.
Un año después, ya tenemos disponible (el estreno oficial era este domingo en BBC America, lunes en HBO España) '¿Sabes deshacerte de un cadáver?', el primer episodio de la temporada 2 de 'Killing Eve'... y, como era de esperar, ha sido un regreso fantástico y generoso.
La temporada, de la que en Espinof hemos podido ver los dos primeros epsiodios, comienza momentos después de ese encuentro entre Eve (Oh) y Villanelle (Comer). Las dos comienzan a vagar por Paris: la primera en estado de shock, tiene que regresar ipso facto a Londres por orden de Carolyn (Fiona Shaw); la segunda, malherida, logra colarse en un hospital para que la atiendan.
El reajuste tras el clímax
Es el momento del ¿y ahora qué?, del volver a reunir los pedazos desprendidos del sorprendente desenlace del gran encuentro para volver a la carga. Nada ha cambiado, pero todo lo ha hecho. Eve hace unas semanas era solo una funcionaria, no una agente de campo, y tiene mucho que procesar; Villanelle sigue dando muestras de su psicopatía, pero la situación se ha descontrolado.
A esto habrá que agregarle el hecho de que sigue habiendo asesinatos de alto perfil, y Eve entra a un nuevo equipo para intentar localizar y destruir la organización para la que trabaja Oksana. Estos dos episodios muestran el cambio traumático y, a la vez, la vuelta al trabajo.
Un reajuste que, a su vez, refleja uno en el equipo creativo de 'Killing Eve': la magnífica Phoebe Waller-Bridge se apartaba del guion de la serie para contratar a Emerald Fennell (conocida por su papel en 'Llama a la comadrona') como su sucesora.
Había ciertas dudas porque no tiene demasiado currículo como guionista, pero la verdad es que la transición es tan suave que hubiera jurado que esto es obra de la creadora de 'Fleabag'. Porque se mantiene con la frescura, el humor negro y la gran exploración de sus protagonistas.
Todo lo que nos enamoró de la primera temporada, se potencia en esta segunda a través de un guion soberbio, unos diálogos punzantes y precisos y, sobre todo, unos personajes muy cuidados interpretados con una maestría envidiable.
En definitiva, 'Killing Eve' regresa en buena forma, recordándonos por qué fue una de nuestras obsesiones de 2018 y tiene pinta de serlo de 2019. El comienzo ha sido sensacional... y nos quedan ocho semanas muy prometedoras.
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