Corren tiempos maravillosos para los amantes del cine de acción. No sólo estamos viviendo una década que nos ha dejado la mejor cinta del siglo XXI, y una de las mejores de la historia, en su género —hablo, obviamente, de 'Mad Max: Furia en la carretera'—; también estamos disfrutando de una época dorada para industrias como la indonesia, que nos ha regalado joyas como ambas partes de 'The Raid' o esa salvajada titulada 'The Night Comes for Us'.
Centrándonos en el territorio estadounidense, no cabe duda de que la gran representante del cine de artes marciales reciente fue una 'John Wick' que se estrenó de tapado en tierras españolas bajo el título de 'Otro día para matar', dejando a los aficionados boquiabiertos con su cuidado tratamiento formal, sus fantásticas coreografías, y con la violenta carnicería encabezada por un Keanu Reeves impecable en su labor de máquina de matar.
Tres años después, la secuela titulada 'Pacto de sangre' elevó a la enésima potencia lo visto en el filme de 2014, incrementando sus virtudes y sellos de identidad hasta unos niveles que muchos creíamos insuperables. Y hablo en pasado, porque 'John Wick: Capítulo 3 - Parabellum', ha logrado superar cualquier tipo de expectativa al brindarnos la orgía de acción, sangre, pólvora y huesos rotos definitiva.
Una saga en inagotable crescendo
Haciendo retrospectiva, es harto complicado encontrar una trilogía que, independientemente de su género, logre evolucionar con tendencia ascendente en términos de calidad a lo largo de sus entregas. 'John Wick 3' puede que sea la excepción a esta regla no escrita; porque detrás de un cariz continuista al que señalar como el mayor "defecto" de la película, se esconde el "más difícil todavía" de una saga cuyos elementos definitorios siguen progresando en un crescendo constante.
El primero de estos componentes, como no podría ser de otro modo, es su sentido de la acción y el espectáculo. De nuevo con Chad Stahelski en el asiento del director, 'Parabellum' lleva un paso más allá lo visto en sus predecesoras a golpe de autoconsciencia y de un diseño de las set-pieces que combina la sofisticación de sus calculadas coreografías y un espíritu cafre y casi paródico que, aunque pueda sonar extraño, aproxima la cinta al terreno del slasher.

No es casual que durante la secuencia introductoria, y al igual que ocurrió en 'Pacto de sangre', Stahelski se detenga para homenajear al maestro Buster Keaton; porque, en su locura, 'John Wick 3' se hermana áun más si cabe con el mejor slapstick mudo, ofreciendo un delicioso cóctel de actores jugándose el tipo, acrobacias imposibles y desenfreno narrativo que, además, nos deja algunas de las secuencias de acción más alucinantes que hayamos visto en un largometraje de este corte —ojo con los perros—.
De igual modo, 'Parabellum' dedica buena parte de sus más de dos horas de metraje a ampliar la rica mitología planteada en la original y extendida en la primera continuación. El universo de asesinos a sueldo gana peso y densidad al presentarse nuevos organismos internos, altos cargos y detalles sobre sus enrevesadas dinámicas, mientras se da un tratamiento especial al pasado del protagonista y sus aliados; algo que el largo puede permitirse en detrimento de una trama de lo más simple —que no inefectiva—.

El gran broche de oro a todo esto se oculta tras un soberbio empaque visual que continúa la estela de 'John Wick 2', alejándose de los verdes y ocres que predominaron en el debut de la franquicia para inundar la pantalla de colores saturados en un ejercicio fotográfico impecable y ultra estilizado que, además, nos deja una clase magistral sobre el uso de luces prácticas y reflejos. Impresionante.
'John Wick: Capítulo 3 - Parabellum' conoce a la perfección los puntos fuertes que han tenido a los fans rogando una nueva dosis de muerte y destrucción marca de la casa y, minimizando riesgos, ha optado por ofrecer una versión hipervitaminada de su fórmula, ante la que es imposible no caer rendido. Cuánto aguantará antes de mostrar signos evidentes de desgaste es una cuestión que sólo puede contestar el tiempo, pero, por el momento, sólo puedo lanzar al aire una sola pregunta: ¿Cuándo se estrena la cuarta?
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17 comentarios
lucarpa
De las películas mas bizarras que uno pueda ver
El final es lo superlativo a la idiotez misma de aceptar cualquier estupidez pueda suceder.
stranno_
Soy muy de Keanu Reeves y el hombre del saco es un personaje masmola. Pero las dos primeras eran entretenidas y ya, tampoco nos flipemos. Visualmente están bien pero no aportan nada al género, lo de las coreografías de tiros ya está más que sobado y a la saga John Wick le queda el Mediterráneo para llegar a parecerse a los tiroteos de Equilibrium, por poner un ejemplo.
Entrambosmares
Yo no las recuerdo para tanto. Lo del hotel de asesinos y demás historias de la segunda le quitó la poca gracia que tenía la original.
luaga
Te referías al siglo XXI.
markbern
Dos días después, y aún no han corregido la errata del título.
Un ejemplo más de en lo que se ha convertido este blog.
alexmiranda2
Es una total Obra de Arte, de principio a fin.
No hay nada más que decir. TE amo Keanu
vi_heine
Un gran actor desperdiciado en otra supernumeraria película, horrible película, donde lo único insuperable es la cantidad de sangre que chorrea desde la pantalla. Siempre el mismo cliché, el ex de la ex venido a menos que no sabe hacer más que matar y a eso se dedica pero arrepentido de hacerlo (?), y aún reventado mata mejor que los sanos. No la pude terminar de ver, me durmió. Si tan sólo hubiese tenido un buen libro, pero bueno, hoy la cosa corre por la expectacularidad...
josehernandez12
Realmente son pocos los que se atreven a dar una critica rígida a esta saga. Las he visto como un pasatiempo y dudo que vea la cuarta. Aquí hacen la comparación con la ultima de mad max, y vaya qu si estoy de acuerdo, no por lo buena, sino por absurda. Es que ambas no tienen ni pies ni cabeza, es de un punto A un punto B y regresar, y todo para que? lo de los fanboys del final fue patético. Por que se esmeran en decir que es la mejor película de acción de los últimos tiempos? Esta bien que la calidad del cine en general ha ido para abajo, pero no por ser tiempos malos hay que decir que esta película es sobresaliente. Mi humilde opinión.
pabeni
Que cantidad de lisonjearías vacías y sinsentido y total para la enésima película de tiros amercanada vacia que sin pena ni gloria pasará. No voy al cine a ver estas mierdas. Chao.
Usuario desactivado
Se me colapsa el cerebro cuando el autor dice que van creciendo en calidad... De verdad, es todo lo contrario, es una caída en picado.
A falta de ver la tercera, la primera es mucho mejor que la segunda, que tampoco es que sea una maravilla, pero se aleja de la total incoherencia de la segunda. La primera tenía la novedad, la duración justa, estaba bien equilibrada, el guión tenía su miga y los personajes sus motivaciones. Todo eso desaparece en la secuela.
Vieron que la primera gustó, y han dicho "más acción, más muertos, más presupuesto, más actores conocidos", y se han olvidado del guión. Que es inexistente, no hay por dónde pillarlo. Ridículo, los personajes no saben ni qué motivación tienen. Entre escena y escena de acción, para rellenar huecos, ponen cuatro chorradas insufribles de códigos y deudas de honor, de postureo de uno y otro lado, y ya está, escena salvada.
Ya lo he dicho por aquí alguna vez, y es que el tal Wick no es una máquina de matar (aunque tenga la mejor puntería del mundo), sino que son los "malos" las "máquinas de morir". Fijaos en la escena de la segunda cuando se carga como a 200 tíos. Van todos a lo kamikaze corriendo hacia Wick sin cubrirse, y de uno en uno buscando su disparo fácil en la cabeza, para no ponerselo demasiado complicado al protagonista (que el tío ya se mueve lo justo y menos, pero aún así vamos a darle un traje antibalas con tela fina fina, como si eso no provocase heridas... flipo, vaya idea para ahorrar pasta). Y por supuesto, cuando tiene balas, aparecen todos, pero cuando Wick tiene que recargar, ni un malo a la redonda. Leches, si parecen más tontos que los tíos esos plateados de los Power Rangers.
Luego las interpretaciones... Justitas justitas. Bueno no, bastante malas. Escenas sobreactuadas o interpretadas de mala manera, sin ganas (que se nota tela)... al protagonista a veces se le olvida que está herido y al rato vuelve a acordarse. Vamos, cero empatía con todos, ves la película y te da lo mismo quién muera, ningún personaje dice nada, no llenan. John Wick suspende como héroe de acción, la poca relevancia que ganó en la primera desaparece aquí.
Lo peor es que en este blog, que supuestamente es de entendidos del cine, anden flipando y diciendo que están en la cúspide, entre las mejores películas de acción de la historia. ¿En serio? ¿De verdad estamos hablando de John Wick? A veces dudo que hayamos visto la misma película. Un blog de cine debe ser más imparcial, y no tan fanboy.
Del 0 al 10, a la primera le daba un 6, por la frescura y novedad de la idea, y porque era entretenida. Pero la segunda no merece ni un 2. La tercera... Paso, lo siento. Esa pelea que mostráis en el vídeo con sobreactuaciones a lo Jackie Chan es repulsiva. Nunca más. No voy a verla ni de la forma que por descontado es la apropiada, que es dejando uno el cerebro en casa. Y lo dice un fan de las películas de acción, sorprendido además al ver que casi la ponen por puntuación al nivel de Arma Letal o Die Hard. Venga ya, no están ni de lejos en la misma liga.