La quinta jornada del Freakemacine ha sido probablemente la más delirante de todas, la más surrealista y también la más divertida. Y todo ello debido a la proyección de la última película dirigida por el mítico Jess Franco en la que muy probablemente sea la sesión más entretenida a la que haya asistido nunca, aunque no por méritos del film.
Antes de presenciar aquello toda la tarde se dedicó a la proyección de los 17 cortometrajes enviados al festival en la sección oficial. Visionar tantos cortos seguidos es absolutamente matador, sobre todo si tenemos en cuenta que hay que estar cambiando el chip —el del cerebro— cada diez minutos sumado a la incomodidad de las butacas. Los cortometrajes fueron divididos en dos tandas y yo sólo pude asistir a la primera función debido a una de esas incompatibilidades de horarios que me impidieron estar en la segunda tanda. No obstante, dudo mucho que hubiera aguantado. El festival está poniendo a prueba mi resistencia como ser humano, y no por las películas o actividades, sino por las fiestas que hay después. Debo confesar, no obstante, que empiezo a lamentar que sólo queden dos jornadas,
Bo Juh Nielsen y Jose Luís Alemán de Córdoba
Al entrar en la sala donde se proyectaban los cortometrajes repartían unas papeletas con los títulos de todos los cortos; a la salida había que votar por dos en cada grupo para así decidir cuáles se llevarán el premio del público, que serán entregados el próximo domingo en la ceremonia de clausura en la que también se homenajeará la figura de Toñito Blanco, pero de eso ya hablaremos.
Bo Juh Nielsen y Jose Luís Alemán son los dos nombres con los que yo me voy a quedar de la primera tanda de cortos. El primero por ser el director de 'Under the Fold', cortometraje que os dejo ahí para que juguéis por vosotros mismos. Un trabajo de animación lleno de sensibilidad en el que Hayao Miyazaki se da la mano con King Vidor y Fritz Lang. No, no exagero. Absolutamente delicioso. El segundo es el director de 'Hotel', una simpática historia sobre un hombre que encuentra un hotel muy curioso en medio del desierto. El final no tiene desperdicio. De este os dejo el tráiler.
'Al Perira Vs The Alligator Ladies'
Fui advertido incluso por algunos de los responsables. Ya había sufrido en todas mis carnes el documental 'A ritmo de Jess' (id, Naxo Fiol, 2012), el cual daba pistas, numerosas pistas todo hay que decirlo de por dónde van los tiros en esta ¿película? lo cierto es que la vi acompañadoentre otros, del productor Ferrán Herranz —quien puso todo su empeño para sacar el proyecto adelante cuando el actor Antonio Mayans acudió a él para ello, con una historia muy, muy, bonita detrás, y también muy íntima, tanto que a pesar de ser narrada un par de veces en el festival, creo que es algo que sólo pertenece a la vida privada de los involucrados; sólo diré que me parece algo maravilloso, emotivo y muy grande—, y de Luije Moyano, un cachondo mental cuyas risa es enormemente contagiosa. Es eso precisamente lo mejor de la proyección de ayer noche, el cachondeo general que supuso tal y como el propio Franco hubiera querido.
La película en sí es un ejercicio de metalingüismo que ni David Lynch es capaz de hacer. Un despropósito sin pies ni cabeza que encuentra su razón de ser en las ganas de hacer cine. No hay más. Hubo gente que abandonó la sala, y es que el que no aguante sus primeros 20 minutos sufrirá de por vida. La proyección fue interrumpida al poco de empezar para un número sorpresa que la organización tenía preparada: una sexóloga —evidentemente una actriz— puso en aprietos a los hombres allí presentes advirtiendo que se debe practicar mas y mejor el sexo oral, un mensaje lanzado sin piedad y con humor y que no sé si habrá cuajado en el público masculino debido a lo mal que se usa la lengua en dicho contexto.
Así pues, en consonancia con el tema, dejo el siguiente vídeo. Mañana más. Si sobrevivo.
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