Por fin llega a los cines españoles 'Especiales' ('Hors normes', 2019), la película de clausura del pasado Festival de Cannes. Desde entonces, el nuevo trabajo de Éric Toledano y Olivier Nakache recibió el premio del público en el 67º certamen de San Sebastián, se convirtió en un éxito de taquilla en Francia y fue nominada a ocho Premios César (este viernes se celebra la polémica gala).
Al igual que 'Intocable' ('Intouchables', 2011), el fenómeno por el que se hicieron conocidos Toledano y Nakache, 'Especiales' se apoya en dos grandes protagonistas para contar una historia basada en hechos reales donde el drama se rebaja con una visión esperanzadora de la vida y constantes dosis de humor, haciendo digerible la cruda realidad de los personajes.
Vincent Cassel y Reda Kateb, entregados y convincentes, encabezan el reparto de la película encarnando a Bruno y Malik, dos amigos cuya vida gira en torno a dar refugio y ayudar a niños y adolescentes autistas. Son los encargados de dos organizaciones sin ánimo de lucro que se ocupan de casos extremos, jóvenes con problemas abandonados a su propia suerte, sin otro sitio al que acudir.
'Especiales' convierte el material de un intenso drama en una estupenda "feel good movie"
Tras conocer de primera mano la labor diaria de estos profesionales, Toledano y Nakache se apoyan en sus observaciones e historias auténticas para trazar los retratos de sus personajes y orquestar un drama que se siente verdadero en todo momento. Un inspirado casting y una puesta en escena sencilla con una narración realista y nerviosa, que plasma el estado de ánimo y un tono que recuerda al documental, se ajustan a este objetivo.
Los carismáticos Bruno y Malik ejercen de guía para introducir al público en los escenarios, conflictos y personajes de esta historia, si bien la acción se divide para presentar las circunstancias de varios de esos muchachos desamparados y sus esfuerzos por aprender, mejorar, superar sus obstáculos o al menos poder funcionar con ellos, y convertirse en ciudadanos de provecho. Así nos preocupamos y sufrimos más por ellos.
Y mientras los chicos libran sus batallas, 'Especiales' muestra cómo este trabajo afecta a los cuidadores, haciendo especial hincapié en el deterioro de la vida personal de Bruno, incapaz de desconectar y preocuparse de otro bienestar que no sea el de sus protegidos. Todo esto aporta la faceta humana e íntima que necesita la película para generar empatía y conectar con lo que sucede en pantalla.
Para complicar más las cosas, se pone en marcha una investigación gubernamental que amenaza con cerrar el centro dirigido por Bruno, quien combate las situaciones desesperadas con medidas desesperadas como emplear a cuidadores sin titulación oficial o descuidar la contabilidad y acumular deudas. Este conflicto burocrático, expuesto de forma algo simplona, acentúa la tensión en una película intensa y de claro mensaje reivindicativo.
Se destaca la dura realidad de esos centros de acogida pero, sobre todo, su necesidad porque son los últimos refugios para muchos jóvenes. Desde luego, Éric Toledano y Olivier Nakache no son cineastas de sutilezas; necesitan subrayar y reincidir en los temas claves, conduciendo siempre al público y recurriendo a esas convencionales escenas alegres con música motivadora y optimista para restar gravedad a la historia. No obstante, les ha quedado una película muy estimable, entrañable y conmovedora. Merece la pena, sobre todo por sus dos excelentes protagonistas.