Empecemos, porque por algún lugar hay que hacerlo, dejando temprana constancia de una de las mayores obviedades que, con el paso del tiempo, ha terminado rodeando a 'La sirenita' ('The Little Mermaid', Ron Clements y John Musker, 1989). Y esa no es otra que el hecho de que el filme estrenado hace veintiséis años supuso, a todas luces, un antes y un después en la trayectoria de Disney, una ruptura con la inercia que los estudios llevaban arrastrando desde hacía demasiado tiempo y el primer —y gigantesco— paso en una recuperación de formas que la llevaría en muy poco tiempo a estar, como nunca antes, en lo más alto de la cadena alimenticia de la animación.
Como hemos visto en este especial, desde que Walt Disney falleciera, el rumbo de los estudios que con tanto esfuerzo logró levantar hasta convertirlos en una marca conocida a nivel mundial había comenzado a ir a una deriva palpable, por supuesto, en el amplio grupo de producciones que comenzando con 'Los aristogatos' ('The Aristocats', Wolfgang Reitherman, 1970) llegaba hasta el filme que cubríamos la semana pasada, esa 'Oliver y su pandilla' ('Oliver & Company', George Scribner, 1988) que, aún con sus pobres resultados artísticos, presagiaba cambios en el rumbo de la productora.
Retorno al musical

Muchos son los responsables a los que habría que apuntar en ese regreso a la grandeza que las aventuras de Ariel supusieron para la Disney. Algunos de ellos ya los nombrábamos hace dos semanas en la entrada correspondiente a 'Basil, el ratón superdetective' ('The Great Mouse Detective', Ron Clements, Burny Mattinson, David Michener y John Musker, 1986) —los Michael Eisner y Jeffrey Katzenberg— pero, de tener que citar a los cuatro que fueron determinantes en que 'La sirenita' tomara forma definitiva, habría que centrar el discurso, tanto en sus dos directores —de los que hablaremos más adelante— como en aquellos que dieron voz y alma a esa chica rebelde de pelo rojo cuyo sueño es vivir fuera del agua.
Alan Menken y Howard Ashman ya habían colaborado juntos en el inmenso éxito de Broadway que había sido el musical de 'La pequeña tienda de los horrores' —que sería trasladado por Frank Oz a la gran pantalla en una desternillante producción— y, convencido de que el sonido y la frescura de su trabajo era algo que podía sentar muy bien a la adaptación del cuento de Andersen que se traían entre manos, Katzenberg propuso al tándem la composición de todo el material musical de 'La sirenita', tanto aquello que competía a unas canciones que iban a volver a cobrar absoluto protagonismo en el avanzar de la trama, como la música orquestal que le serviría de refuerzo.

Mezclando diversos tipos de ritmos —que van desde el folk a la música caribeña pasando por el sonido típico de Broadway o el cabaret—, las canciones y la música de 'La sirenita' fueron escritas antes de que se comenzara con el proceso de animación del filme, retornando así a una tradición de la compañía que se había perdido con el paso de los años y que, a todas luces, sentó de forma espléndida a un filme del que es imposible descartar un sólo número, ya estemos hablando del 'Part of your world' como si lo hacemos de las inolvidables 'Under the Sea' o 'Kiss the Girls', canciones todas que forman parte del acerbo musical de varias generaciones de espectadores.
De tal calibre es el trabajo que Menken y Ashman pusieron en juego en la composición de 'La sirenita', que este fue el primero de muchos filmes posteriores que hizo que la Academia estadounidense se postrara ante el incomensurable talento desplegado por ambos, otorgándole las dos estatuillas a las que estaba nominada, la de Mejor Canción por la citada 'Under the Sea' y, por supuesto, la de Mejor Banda Sonora, algo que no se producía desde que en 1964 'Mary Poppins' (id, Robert Stevenson, 1964) lograra la misma hazaña.
'La sirenita', Disney comienza a reinventarse

Ahora bien, resulta muy evidente que si sólo la música y las canciones hubieran destacado sobre el conjunto, 'La sirenita' quedaría hoy lejos de ser considerada el Clásico que es y, por supuesto, carecería de ese talante de ruptura con lo anterior y primer escalón de lo que estaba por venir en el largo recorrido de los estudios Disney. Huelga afirmar que, obviamente, la cinta dirigida por Clements y Musker encierra muchos más valores que la siguen encumbrando, tantos lustros después, como una de las mejores cintas de animación de la historia del cine.
Para empezar, está el increíble salto evolutivo que da la animación con respecto a ejemplos anteriores: no sólo es que los fondos se cuiden sobremanera —algo que, por ejemplo, brillaba por su dejadez en 'Oliver y su pandilla'— o que los diseños, movimientos y gesticulaciones de los personajes sean de una brillantez incontestable; es que el trabajo de los animadores comienza aquí a abundar en efectos generados con ayuda de los ordenadores llamados a llegar allí donde la pericia de la mano no es capaz. ¿El ejemplo más claro en este sentido? todas las escenas sub-acuáticas y lo conseguido de la sensación de estar bajo el mar.

Y para continuar, y redondeando un conjunto que ya empieza a rozar el sobresaliente de mano de música y animación, encontramos un guión que toma la esencia del cuento de Andersen, elimina aquello del mismo que no hubiera resultado acorde al espíritu de la compañía —algún detalle del desarrollo y, sobre todo, el amargo final que cierra el relato del escritor danés— y otorga a la personalidad de su protagonista, que podía haberse quedado en la típica princesa Disney, ciertos valores que la separan de predecesoras como, por ejemplo, Cenicienta o Blancanieves.
Ariel no es aquí descrita como una desvalida joven que necesita ser rescatada de una vida desgraciada por un príncipe azul, sino una quinceañera capaz de plantarle cara a su padre y pelear por aquello que quiere. Esto, que habla muy bien de esa ruptura con el pasado que plantea la cinta, viene a unirse a una villana arrebatadoramente deliciosa y cruel —mezcla explosiva entre la Divine de Jon Waters, Cruella de Vil y la Reina de Corazones— y a un clímax espectacular para rubricar un filme por el que no pasa el tiempo, una de esas mágicas producciones que, aún sin ser perfecta, siempre permanecerá en nuestra memoria como un momento irrepetible y singular. En definitiva, un clásico atemporal.
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36 comentarios
juno.cupedarrion
Úrsula es uno de los mejores villanos que ha dado Disney... ¡Qué mujer!
Herodoto
La cinta es una maravilla y estoy completamente de acuerdo con Sergio, pero alguien que renuncia a su especie, a su propio mundo y a todo lo que siempre ha conocido y querido por un tío del que se enamoró a primera vista en mitad del mar es de todo menos representativa de la mujer moderna.
eugeni.u
También soy de los que piensa que con la muerte de Ashman se perdió la parte mas importante del binomio con Menken. Nunca después se llegó a la perfecta sincronía de argumento con diálogos y canciones que se produce aquí.
Sobre el tema del machismo, creo que también se dio un paso adelante con una heroína independiente y mas que autosuficiente. La gente interpreta cosas rarísimas para cargar las tintas. El cine infantil ha jugado mucho con los estereotipos y les ha dado la vuelta mas de una vez. Este es un caso muy claro y precursor en este tema. Quizas el último, mas claro y fascinante sea "La Lego Película"
jaume82
El cangrejo Sebastián era el mejor y la escena en la cocina del castillo genial jaja
anikaqueen
Por fin ha llegado...Mi pelicula favorita de Disney
filmman
Dejo el making of de unos 30' de 'La Sirenita' en VOSE.
https://www.youtube.com/watch?v=VbBgWO3AC34
Time Paradox
"Tú crees que en otros lagos las algas más verdes son
Y sueñas con ir arriba, y qué gran equivocación!
¿No ves que tu propio mundo no tiene comparación?
¿Qué puede haber allá fuera que causa tal emoción?"
UN CLÁSICO, ASÍ EN MAYÚSCULAS.
joseantonio.lopezvin
Yo he visto esta mañana el post, se me ha olvidado y ya no he comentao. como ya se ha dicho, Howard Ashman, el Disney de después de Disney, afirmación que aún hoy en día comparten muchos en el estudio, puesto que parte de el timing de la película lo supervisó el junto al otro gran dúo de directores, John Musker y Ron Clements, se nota mucho la pasión del equipo, igual no han llegado a lo técnicamente brillante como en el Rey León o La Bella y la Bestia, pero la pasión y las ganas de hacer algo grande se notan muchísimo, aún queda mejor al ser la última de animación realmente tradicional, es decir, sin (casi, hay un par de escenas) ningún retoque de ordenador, pintando los colores a mano y toda la pesca (me ha salido una coña jur jur).
Como detalle la canción de "part of your world", cuando en el verso "look at this trove, treasures untold" hacen rotar la cara de Ariel, simulando una cámara que le hace un paneo, para luego señalar al agujero de la gruta, genial la actriz que da la voz a Ariel en V.O, Jodi Benson, que aún hoy en día suena juvenil pese a tener más de 50 años y aquí está perfecta.
Y por último enorme el doblaje hispanoamericano, nunca he podido escucharla en castellano, nunca y como dicen abajo, si la he escuchado es para que m eden mampurrias de oirla.
Sokar7
Una de las películas más machistas que he visto
norep
Una de mis películas favoritas de Disney, eso sí, esta vez apoyo el doblaje latino americano. Cuando la doblaron al español me sonaba horrible y algunas veces la han puesto en la tele y es de lo peor.
aurynd
Peliculón donde los haya, una protagonista que ya auguraba un cambio en el modelo de heroina de Disney, más acorde a la época, una malvada carismática, unos secundarios carismáticos que roban cualquier escena, mención especial al salao de Sebastián y a la gaviota, y una banda sonora que perdura en el imaginario popular.
Un CLASICO con todas las letras.
loula2
Estupenda película!! Los personajes están perfilados con gracia, la animación es muy buena y la música está a la altura.
Jordi Tordera
Enhorabuena, Sergio por el artículo y por el gusto. Una de las películas que más me han llegado del sello Disney. La vi en el cine en su día, y recuerdo que salí con el corazón cosquilleándome. Me encanta el diseño de los personajes, la música, el ritmo de la película. Una de las mejores villanas y una de las mejores heroinas que ha hecho Disney. Sebastian, adorable.
princecharming
Casi me haces llorar con tu crítica!! jajajja!!! Cuanta razón en todo!! LA MEJOR PELICULA DISNEY SIN PARAGON NINGUNO!!!!
rafamaquina
Yo no digo naaaaa, pa que, si esta todo dicho.
lexs
Hay que agradecer a Alan Meken, es parte fundamental de todo ese despertar de Disney en los 90s.
reydelahorro1
me fascina las película de disney por fin otra para la colección