De acuerdo, no es ningún escándalo, venía bien para el título, pero uno no puede dejar de sorprenderse, tras ver 'Diario de un Escándalo', de lo injusto que resultó el último Oscar a la mejor actriz. Estaba tan claro, tan cantado, que Helen Mirren iba a ganar que así fue y nadie protestó. Seguro que Judi Dench, consciente de su posición de perdedora en la glamourosa ceremonia (una de las peores de la Historia en lo que a candidatos y previsibilidad se refiere), se divirtió (como hace en el film que nos ocupa) viendo a Mirren acordándose de la Reina mientras alzaba la estatuilla; lo había tenido tan fácil, en una película tan sobrevalorada, pero está claro que imitar a alguien (público y reconocible) siempre va a contar con el apoyo de las masas... Sin embargo, Dench había creado un personaje complejo, lleno de matices, se había metido dentro, y lo había vivido hasta desarrollar un monstruo tan cotidiano, un ser despiadado tan enternecedor, que no darle el Oscar es, simplemente, uno de los robos más sutiles producidos en la larga trayectoria de unos premios que cada año avanzan en su declive; el día menos pensado, un programa de tres al cuarto le robará todo el protagonismo y la entrega de las estatuillas doradas quedará para los más fanáticos y solitarios amantes del séptimo arte. En cuanto al de mejor actriz de reparto, está claro que Cate Blanchett se lo merecía también antes que Jennifer Hudson, pero prefiero no decir nada más, ya era de por sí suficientemente ridículo premiar a una chica porque canta muy bien; un Grammy, vale, ¿un Oscar? ¡Venga ya!
'Diario de un Escándalo' ('Notes on a Scandal') está basada en la novela de Zoe Heller. La historia tiene como principal protagonista a Barbara (Dench), una despótica profesora que vive sola, sin amigos ni confidentes, cuyo mundo cambia por completo cuando conoce a la nueva profesora de arte de la escuela, Sheba Hart (Blanchett). Sheba parece ser el alma gemela y la leal amiga que Barbara siempre ha estado buscando. Pero cuando descubre que Sheba mantiene una tórrida relación con un jovencísimo alumno, su naciente amistad da un terrible giro.
Realmente, tal como se ha dicho ya en otras críticas, como la de mi colega Red Stovall, la historia de esta película da poco de sí, es la típica de un telefilme de los que ves relajado en el salón de tu casa, sin otra cosa mejor que hacer. Sin embargo, la labor de las dos actrices principales consigue que nazca un gran interés por todo lo que sucede en la pantalla y te mantiene pegado a la butaca especialmente conforme se va llegando al desenlace de la película; un desenlace que incluye un enfrentamiento vibrante entre las dos protagonistas, de los que quitan el hipo. Por cierto, destacar la excelente banda sonora de Philip Glass, uno de los factores fundamentales para lograr todo esto que he comentado, que te sientas atrapado por lo que ves/oyes/sientes. Y segundo "porcierto": otro Oscar robado el de esta categoría. Menuda noche.
Con lo ya dicho, sobra todo lo que pueda escribir del inmenso trabajo de Judi Dench en esta 'Diario de un Escándalo'. Tan sólo comentar que si no tuviera tendencias lésbicas, podría ser la pareja perfecta de Hannibal Lécter; la de travesuras que podrían hacer estos dos. En cuanto a Blanchett, no me parece que esté a la altura de su compañera de reparto, como ya he dicho, y a diferencia de muchas reseñas y críticas que he leído. Fundamentalmente, me chirría bastante todo su "romance" con el chaval (Andrew Simpson, al que odio desde ya, por tener la gran suerte de revolcarse con la bella actriz); está claro que algo así no puede suceder por razones lógicas, vale, pero en la película no está justificado que el personaje que hemos visto, que se ha ido construyendo en pantalla, tenga la estúpida idea de enrollarse con un nene. Para colmo da razones como que le dedicó un gol o que le dedicó piropos o que la perseguía. ¡Por favor! Un servidor lleva haciendo eso con Scarlett Johansson varios años y no hay manera ni de que invite a palomitas.
Bromas aparte, protagonistas femeninas aparte, también tenemos en el film a gente competente como Bill Nighy paseando carisma y poco más. Aunque su personaje tiene un comportamientos un tanto estúpido (casi siempre), en este caso sí que están muy justificados y sólo considero que Richard Eyre no le hizo justicia al dejarle muy poco tiempo para poder lucirse. Cosa que podría haberle reportado una honrosa mención en más de un certamen, a la vista del éxito que tiene para colocar a sus actores en las listas de las mejores interpretaciones del año (ya pasó con 'Iris', recuerdo).
En definitiva, 'Diario de un Escándalo' es un notable drama con dos protagonistas femeninas muy inspiradas, especialmente Dench. Con la poca calidad que hay hoy día en las carteleras, esta película es casi una cita imprescindible, a menos que prefieras una de tiros o una de suegras desesperantes.
Ver 4 comentarios