Hoy Jorge Javier Vázquez llora de emoción. Los móviles de los colaboradores de Dolce Vita echan humo. Jaime Cantizano se abraza con los viandantes. Emma García grita presa de los nervios. Pasada la crónica amable sobre el nacimiento de la Infanta Doña Sofía, ha caído el premio gordo para la prensa del corazón. Isabel Pantoja, detenida.
La Operación Malaya se la ha llevado por delante (presuntamente, claro). Y mira que han sido meses en los que los buitres de la prensa del corazón han merodeado a la presa. La entrada de su novio Julián Muñoz en la cárcel ya les ha dado de comer durante meses y meses, y cuando el ex-alcalde marbellí ya estaba usado hasta la extenuación, su hijo ha sido la víctima.
Pero todo esto no ha sido más que el aperitivo. El verdadero festín empieza ahora. La Pantoja, detenida. Y no digo nada si va a juicio. Y no digo nada si va a la cárcel. Si se han "cebado" con ella hasta ahora... lo que se le viene encima a la tonadillera no tiene nombre. Y lo peor de todo es que nos va a tocar ser testigos.
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