En los últimos meses estamos asistiendo a la revolución de las redes sociales en la televisión. Por eso no es de extrañar que desde los programas se ofrezcan hashtags para comentar una emisión en Twitter o que los presentadores se vanaglorien de cuantos trending topics consigue un espacio durante su estancia en la parrilla. No podemos olvidar que si algo han conseguido redes sociales como Twitter es poner en contacto, directo y gratuito, al espectador con las distintas cadenas de televisión, aunque ello no logre conseguir el bien más preciado: la audiencia.
Redes sociales y audiencia no van necesariamente de la mano, aunque sí es verdad que si un programa tiene éxito en Twitter tiene muchas posibilidades de que al día siguiente haya destacado como emisión más vista, ya sea como líder de su franja como ‘La voz’ o consiguiendo una media de share superior a la que normalmente obtiene su cadena como ocurre con ‘Gandía Shore’. La misma tendencia se puede seguir en el caso contrario, aunque algunos espacios televisivos nos han demostrado que para ocupar la primera posición de las audiencias no es necesario alzarse como espacio líder en el share social.
Twitter no es sinónimo de éxito… en los audímetros
El ejemplo más evidente de este último caso lo encontramos en ‘Isabel‘, la ficción de La 1 que suele ser eclipsada en Twitter por espacios como ‘La que se avecina’ o ‘Tu cara me suena’. Aún así, la serie de la cadena pública ha sabido conquistar a la audiencia o, al menos, a aquellos espectadores que tienen el privilegio de tener un audímetro en su casa. Excepto durante las primeras semanas en las que ‘Tu cara me suena’ y ‘La que se avecina’ regresaron a la televisión, ‘Isabel’ ha conseguido ser el programa más visto de los lunes, superando ampliamente los cuatro millones de espectadores, aunque su presencia en Twitter siempre ha sido escasa.
El caso de ‘Isabel’ contrasta con otros que hemos conocido en el pasado. No podemos olvidar que para que un programa suene en Twitter debe contar con, al menos, un grupo numeroso de seguidores que estén dispuestos a comentar la emisión. Quizá por eso, los espacios seguidores por los jóvenes sean los que menos dificultad presenten para convertirse en lo más comentado, como ocurría la temporada pasada con ‘Otra movida’, por ejemplo, el programa de Neox que tenía a su disposición un gran número de fans dispuesto a convertirlo en trending topic con facilidad. A pesar del apoyo en las redes sociales, el programa terminó el curso pasado dejando a algunos espectadores huérfanos a la hora de la sobremesa y, cómo no, un hashtag de despedida que consiguió alzarse como lo más comentado del momento.

Pero hay casos en los que triunfar en Twitter sí va ligado a ser un éxito de audiencia. Es lo que observamos cada semana con programas como ‘La voz‘ que desde su estreno ha demostrado su hegemonía tanto en redes sociales como en audiencias, batiendo todos los récords previstos con antelación. Vemos así como la fiebre del programa de Telecinco afecta tanto a los audímetros como a las cuentas de Twitter, dos termómetros básicos hoy en día para determinar que hablamos de uno de los programas de televisión del momento. A la familia de ‘La voz’ pertenecen un buen número de programas de televisión, que han sabido adaptarse perfectamente a las redes sociales y además alcanzar una audiencia exitosa: ‘Salvados’, ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’, ‘Pesadilla en la cocina’…
Durante este inicio de curso también hemos visto la consonancia que hay entre audiencia real y share social cuando un espacio no tiene el recibimiento deseado. Es lo que ha ocurrido con el estreno de ‘Imperium’ en Antena 3, una serie que no consiguió destacar en Twitter y que pasó por la programación de la cadena con una audiencia pobre que perjudicó su continuación en Antena 3. En este caso podemos decir que Twitter adelantaba cada noche la escasa audiencia que un espacio televisivo marcaría al día siguiente.

Twitter también tiene presencia en los programas diarios, aunque estos tratan de forma muy distinta su presencia en la red social. En la actualidad, ‘El hormiguero’ propone cada día un hashtag nombrando al invitado de cada día, mientras ‘Sálvame’ es capaz de alternar varios hashtags en una sola emisión dependiendo del tema que traten en cada momento. Otros programas, como ‘El intermedio‘, carecen de una mención diaria a la red social, pese a que cuenta con una gran facilidad para alzarse como uno de los programas más vistos de laSexta. En este breve repaso también debemos destacar programas como ‘Punto Pelota’ que, pese a emitirse en una cadena con una menor capacidad de reunir espectadores, logra con algunas de sus polémicas ser muy comentado en la red social.
Ventajas e inconvenientes de dos modelos diferentes
Aunque existen excepciones, las relaciones entre audiencia y Twitter parecen destinadas a encontrarse, motivadas, entre otras causas, por la falta de exactitud que ha rodeado la técnica de los audímetros con el paso de los años. En 2011, en España había instalados 4.625 audímetros, elegidos de manera que representen a todos los espectadores que existen en España. La cifra está lejos de lo que muchos consideríamos como ideal para medir algo tan importante como las audiencias en televisión, un hecho que puede provocar que muchos nos volvamos hacia Twitter para conocer los espacios más seguidos en televisión. Además, con los audímetros los espectadores reales de un programa están a expensas del buenhacer de un grupo reducido de personas, una técnica que no cuenta con el control deseado para estos casos.
Pero Twitter a día de hoy también presenta varios problemas para lograr la eficacia que muchos quisiéramos en este asunto. Aunque la red social pueda albergar a muchos más usuarios que el número de audímetros que hay en España, lo enérgico que pueda ser un usuario comentando con respecto a otro, la actividad de la cuenta oficial del programa o la posibilidad de crear cuentas falsas son elementos que alejan a Twitter de ser una herramienta fiable a la hora de medir las audiencias.
Con este panorama parece que todavía estamos muy lejos de aproximarnos a una cifra más concreta de la cantidad de espectadores que siguen cada programa de televisión. Cuesta creer que el mercado televisivo haya llegado a 2012 manteniendo la ridícula cifra de audímetros que existen hoy en día en España, aunque Twitter se presenta como una herramienta que solo recoge la opinión de un determinado tipo de público (joven, sobre todo) sobre determinados programas, algunos con más capacidad de concentración twittera que otros.
No hay que olvidar el principal motivo por el que se miden las audiencias: los anunciantes. En este sentido, podemos esperar que determinadas marcas tengan más en cuenta eso del share social que otro tipo de productos. Si yo fuera el directivo de una marca de teléfonos móviles a la hora de elegir dónde anunciarme valoraría un programa que consigue alzarse como lo más comentado en las redes sociales, por ejemplo. Pero no hay que olvidar que una de las principales motivaciones de los anunciantes es tener la posibilidad de llegar al mayor número de personas posible. Y eso, a día de hoy, solo lo consiguen los audímetros, aunque sea a través de un sistema que deje mucho que desear.
En ¡Vaya tele! | Cinco programas para ver usando Twitter
Ver 13 comentarios
13 comentarios
mundozombie
Por partes:
1- La medición por audímetros, aunque tiene sus defectos, es un sistema profesional y fiable. Sobre el número de audímetros hemos de recordar que la densidad de estos aparatos con respecto a la población total es superior en España a la de otros países. Es más discutible su reparto geográfico, pero su número no es, en ningún caso, demasiado bajo.
2- No es tan sencillo, como pregunta skymonty, poner un audímetro en cada televisor. ¿Es técnicamente posible? Claro, pero hemos de recordar primero que el audímetro exige un esfuerzo activo por parte del espectador: decir cuánta gente está ante el televisor, su edad y su sexo; y segundo, esos datos precisan de una conexión de retorno para ser comunicados; tercero: nadie (NADIE) hace estudios estadísticos con una muestra del 100% del universo al que se dirige. Seamos realistas.
3- Las redes sociales (sea Twitter u otra) no son sistemas profesionales de medición. No han nacido para ello y no se han diseñado para ello. Son, sin duda, una ayuda indispensable para la promoción y el feedback de un programa de televisión, de una campaña de publicidad o de un producto de higiene personal. De todo. Pero han de considerarse unos datos cualitativos, no cuantitativos. La repercusión en redes sociales nos habla del grado de satisfacción de la audiencia y del tipo de audiencia, pero es muy impreciso cuando hablamos de "cuánta" audiencia. Por ejemplo, MTV tiene un altísimo número de comentarios en Twitter, muchas veces superior a laSexta, pero es impensable creer que su audiencia es superior.
ciudadanopoe
Las dos maneras (audiencia y redes sociales) son los únicos instrumentos que hay. Y hay que aceptar las reglas del juego.
En este sentido, hay productos que cuadran mejor en una cosa que en otra. Y maneras de ver la televisión. Creo que se desprecia mucho la manaera clásica de verla: con atención, si es un buen producto. Porque si una serie tiene contenido y está realizada al detalle, francamente, no se puede ver mientras estás twiteando.
Y no creo que haya que menospreciar esta actitud de un televidente que, sencillamente, ve la televisión. Porque se trataba de esto, ¿no?
buuu
Hay que tener cuenta que los audimetros están diseñados para aportar datos para los publicistas que necesitan saber, no solo la cantidad de gente que lo está viendo sino como es sexo, edad, población, clase social, etc. Poner un anuncio es muy caro como para no saber si a quien va dirigido está viendo ese momento la televisión.
Twitter nunca te hará un estudio de mercado aparte que si un programa consigue ser muy comentado con tweets negativos como "vaya mierda de programa" no quiere decir exactamente que sea un éxito.
skymonty
De verdad no se podrían poner audímetros en todas las televisiones?? De verdad que con la tecnología digital actual no se puede contabilizar lo que un telespectador ve?? Es algo que nunca he entendido. En la forma actual de medir, alguien que tiene un audímetro no es un telespactador natural. Sabe que tiene el poder de cambiar la televisión y eso afectará a su manera de ver la tele. Yo al menos no vería la tele de la misma manera si supiera que mi manera de ver la tele se va a extrapolar a lo que ven 100.000 personas. Por eso me hacen mucha gracia esas campañas de no ver ciertos programas. No sirven de nada, porque aunque 1 millón de personas deje de ver el programa, si ninguna tiene audímetro la audiencia será la misma de siempre. Vamos que habrán perdido 1 millón de espectadores y ni nos habremos enterado. Y no creo que a una marca anunciante eso le mole mucho porque le están cobrando lo mismo por el anuncio cuando han perdido 1 millón de posibles compradores. Vamos que el actual sistema es de lo mas injusto y falso que hay.
Hechss
Pese a que aplaudo a Isabel por lograr los 4 millones y pico que consigue, creo que La que se avecina la supera. ¿Por qué? Porque se emite hasta bastante más tarde (a veces rozan la 1:00) y dura más, por lo que retiene durante más tiempo esos 3.900.000 espectadores o los que sean
roirosal
La televisión es un medio de transmisión solo de ida, por eso los audímetros envían la información a través del teléfono.
En cambio internet es de ida y vuelta. Cuando queremos hacer una petición, por ejemplo, a vayatele, nuestro ordenador hace una petición al servidor que está en Madrid, o donde sea, y nos responde con la información de la página web. Y así gracias esto, vayatele cuenta las visitas a su página web. Lo que se hace en internet para que no haya visitas duplicadas es poner límites, como contar sola una visita por día por ip.