El pasado lunes dijimos adiós a ‘Física o Química’, no sabemos si para siempre pero al menos sí tal y como lo conocemos en Antena 3. Ya hablamos en este blog del final de la serie, pero hoy toca darle una despedida diferente. En esta entrada recorreremos parte de la historia de la serie en una recopilación de diez momentos clave, haciendo un repaso sobre el recorrido de la ficción y sus personajes.
Esto es lo que dio de sí la serie. Desempolvad vuestras carpetas del instituto, colgaros la mochila de un asa y mascad chicle de forma grosera. Empieza nuestro repaso a la historia de ‘Física o Química’. Eso sí, perdonad de antemano que falten momentos, pues no he visto toda la serie y alguno me dejaré.
1. Olimpia, la profesora de hierro
Sin duda uno de los personajes más queridos y que mejor han funcionado en la serie ha sido el de Olimpia, interpretado por la gran Ana Milán. Comenzó con el papel de borde, estricta y casi dominatrix que era un poco herencia del que venía haciendo en ‘Camera Café’ pero más en drama. No obstante, y aunque funcionaba bien así, Olimpia fue evolucionando con el tiempo, desde su ruptura matriomonial hasta la maternidad pasando por varias temporadas, y dejándonos ver un personaje con más aristas de lo que a priori parecía. Y lo que es mejor, se le sacó provecho a la vis cómica de Milán, sacándola de ese rollo tan serio y ofreciendo otros momentos muy divertidos. Pero comencemos recordando la mala baba que se gastaba al principio. Grande.
2. Ruth y Cabano, la historia de amor
La de Ruth y Cabano ha sido la historia de amor protagonista de la serie, con permiso de Fer y David. Desde el principio vimos cómo nacía su relación, con Gorka de por medio, y finalmente quedaron juntos. Úrsula ha demostrado ser una buena actriz mientras que Maxi Iglesias, aun siendo el guaperas oficial de la serie, no ha estado a la altura. Es una seta, tanto el personaje como el actor. Sin embargo, se apostó por la relación, que se ve que tenía su público, y dio momentos como este del lago.
3. El CiberZurbarán
Una de esas tramas locas de la serie. En clase de ¿arte? los alumnos diseñan una versión cibernética del instituto en el que tienen interacciones paralelas. Vale que el CiberZurbarán era cutre a más no poder y sus gráficos parecen sacados de lo más recóndito de la década de los noventa, pero leches, que eran chavales de bachiller diseñando un mundo virtual. Y se practicaba sexo allí incluso, cómo te quedas. Pero claro, tenían la excusa de que una alumna era muy friki, pues vale. Cogidísimo con pinzas pero muy divertido.
4. Blanca e Irene, dos amigas y muchos hombres
Para mí estos fueron los dos mejores personajes de la serie, o al menos los que mejor funcionaron como tándem. Dos chicas muy diferentes, una muy mojigata y soñadora y otra realista y suelta, pero que a la vez tenían una relación sólida de amistad. Y para darle vidilla, no sólo chocaban en sus formas de ver la vida y la sexualidad, sino que siempre había hombres por medio que echaban leña al fuego. Sí, fueron muchos los que pasaron por la cama de una u otra, o de ambas: Jonathan, Isaac, Mario, Miguel, Berto, Martín, Thomas… Pero ellos eran una excusa para ver las divertidas fricciones que surgían entre ellas, a veces genialmente adornadas con sus referencias literarias o filosóficas. La serie perdió muchísimo cuando ambas se fueron.
5. ¿A qué juegas, Alma?
Si hay algo que le gusta más a un guionista de ‘Física o Química’ que una muerte trágica, es un trío. No hacerlo ellos en horario de oficina, que no sé, me refiero a escribirlo para sus personajes. Lo han hecho mayores y jóvenes, triángulos amorosos y relaciones consumadas. Donde comen dos, comen tres, deben pensar. Y así tenemos a Alma, calentando el ambiente entre Paula y Cabano y metiéndose de por medio. Mítico ese “¿a qué juegas, Alma?” en el que Paula flipa con su amiga. Y es que Alma, reconozcámoslo, es uno de los personajes grandes de la serie. Llegó tarde, pero desde su entrada ha estado siempre enredando y dándole vidilla a la serie.
6. Olimpia se pone de parto
Como pasa en muchas series, con el paso del tiempo acabamos viendo el lado humano de los personajes que a priori se nos presentaron como “malos”. Aquí es el caso de Olimpia y Gorka, la profesora borde y el malote de la clase. Ambos comenzaron a mostrar otros registros a parte del inicial y ganaron mucho como personajes. Tal vez el gran punto de inflexión en ellos fue la maternidad/paternidad. Tanto Olimpia como Gorka, por lados diferentes, se enfrentaron a traer un hijo al mundo y eso les ablandó. Pero los dos compartieron el momento del parto de ella, que fue muy divertido, y nos trajo otros buenos momentos después con Gorka como canguro del bebé.
7. El Zurbarán en llamas
Otro dramón de esos increíbles. Si el Azcona de ‘Compañeros’ fue incendiado y casi volado por los aires, el Zurbarán no podía ser menos. Estas son esas tramas locas que hacen que la serie fuese más divertida y menos creíble. Una tragedia más de muchas que sucedían normalmente a final de temporada, como también pasa en otras series como esa de un barrio residencial yanqui que nos trae tornados o accidentes de aviones.
8. Quino revoluciona las hormonas de Yoli
El sexo ha sido fundamental en la serie. Y desde mi punto de vista solía estar bien tratado. No sólo veíamos pasiones idílicas, sino que también había problemas, como en la relación de Quino y Yoli. Ella promiscua pero enamorada y él queriéndose reservar al matrimonio pero dominado por sus hormonas adolescentes. Nos dio diálogos divertidos como este, pero también momentos naturales, como esa primera vez fatídica de Quino en la que todo salió mal y acabó muy pronto.
9. Gorka, el chico malo se ablanda por Paula
Hablaba antes precisamente de esto en el video del parto de Olimpia. Si a ella la maternidad le ablandó, lo que cambió para bien a Gorka fue su relación con Paula. De ser un cabrón que trataba muy mal a Ruth pasó a aprender a tratar a la gente gracias al personaje interpretado por Angy. Aquí tenemos el momento en que da el paso y confiesa sus sentimientos.
10. El primer beso de Fer y David
La relación gay de ‘Física o Química’ ha sido uno de los puntos fuertes de la serie, pero a mí me ha dado bastante pereza. Caían muchas veces en el tedio de mostrarnos una pareja demasiado bien avenida. Porque aunque tenían sus problemillas, sus dudas y sus peleas, siempre acababan enamoradísimos de la muerte. No obstante, como personajes independientes funcionaban y tenían perfiles bastante distintos que se complementaban bien. Durante toda la serie hemos visto comenzar su relación entre secretos y negación, hasta culminar en un desenlace trágico a más no poder. Pero todo empezó con un beso, este beso.
Bonus
Y después de estos diez videos, hay otros dos resaltables a modo de bonus, pues no pertenecen estrictamente a la serie pero sí fueron muy comentados en su día.
El suicidio de Irene
Antena 3 publicó en su web el último capítulo de la cuarta temporada con una última escena que no llegó a verse por televisión. En ella, el personaje de Irene se tiraba por el balcón sin venir mucho a cuento. Los fans de la serie enloquecieron y se preguntaban si esto pertenecía o no a la serie, ya que en la emisión normal no se vio. Finalmente los creadores dijeron que era “sólo un gag”. Una gracia, vaya. Mortal el grito que da como si viviese en un piso diecisiete.
Me quemaría por dentro
Y probablemente esto será una de las cosas más recordadas de la serie. Por culpa de un fallo técnico, Antena 3 junto con Neox y Nova entraron en un bucle infinito que duró varios minutos y en los que se repetían constantemente las mismas escenas y con baja calidad. La coña duró bastante y fue desde Twitter a los grupos de Facebook. Sí, a todos nos quemó por dentro que Ruth dejase Madrid, pero al menos tuvo esta curiosa y divertida despedida que, además, rimaba.
Con estos diez videos damos definitivamente nuestro adiós a la serie. No están todos los que son, pero si son los que están. Y si ha faltado alguno que consideréis importante, siempre podéis decírnoslo en los comentarios. ¿Cuál fue vuestro momento favorito de ‘Física o Química’?
En ¡Vaya Tele! | ‘Física o Química’, la despedida de todo un fenómeno