'Furor', Nostalgia TV

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La noche de los sábados en la televisión a finales de los 90 era toda una aventura para el espectador que se atrevía a coger el mando a distancia. Entre el cine de algunas cadenas, teníamos dos ofertas que levantaban tantos odios como pasiones. Por un lado, la mítica ‘Noche de Fiesta’ en La 1 de TVE (que se merece un Nostalgia para ella sola que le dedicaremos en semanas posteriores); y en segundo lugar, después de varios fracasos en esa franja, Antena 3 consiguió un éxito arrollador con ‘Furor’, un programa-concurso-espectáculo que venía avalado por su éxito en distintos mercados europeos.

Alonso Caparrós volvía de esta forma al prime time para ponerse al frente de esta guerra de sexos entre famosos. Con un tono absolutamente desenfadado donde las reglas brillaban por su ausencia, ‘Furor’ triunfó en su momento por la combinación de música, humor y famosillos de mediano calibre, combinado todo con una encarnizada lucha entre hombres y mujeres por colocar al sexo dominante (cada uno al suyo) por encima del contrario. Nostalgia TV retrocede hoy doce años en el pasado para cantar eso de… “furor, furor, nana nana nanana“.

Reglas del concurso en ‘Furor’

Hablar de las reglas en un concurso que no tiene reglas no tiene demasiado sentido, pero sí existía una mecánica constante de pruebas en la que el juez todopoderoso, Alonso Caparrós, tenía la última palabra. La mayoría de pruebas estaban relacionadas con la música, ya sea cantando o respondiendo preguntas específicas sobre alguna canción o cantante en particular. El equipo que perdía la prueba, debía someterse entonces al “Popurrí”, un mix de canciones que debían cantar como castigo por haber fallado.

Las pruebas eran de lo más variopintas. Desde completar espacios en blanco mientras se cantaba una canción hasta interpretar un tema utilizando siempre la misma vocal (”pere beeler le bembe se necesete ene peque de grecee…“), pasando por encontrar canciones que tengan en su letra una palabra específica (amor, muerte, dolor…) o adivinar el título de una canción utilizando para ello las pistas que daba el presentador. Las pruebas variaban de una semana a otra, pero cada noche caían unas treinta canciones que el sufrido espectador aguantaba como un jabato.

Pero también había pruebas que no tenían nada que ver con la música, como las de agudeza visual o la prueba de los mensajitos, donde los concursantes tenían que escribir una frase o poema a alguien del equipo contrario y éste tenía que adivinar a quién iba dirigido. Pero mi prueba favorita era la del trabalenguas: A cada equipo se le asignaba un trabalenguas, y todos sus miembros de forma individual tenían que decirlo sin equivocarse antes de que se acabara el tiempo. Era el único momento en que los oídos no sufrían, y algunos de esos trabalenguas se repetían tanto que incluso doce años después sigo acordándome de uno de ellos:

Si tu gusto gustara del gusto que gusta mi gusto, mi gusto gustaría del gusto que gusta tu gusto. Pero como tu gusto no gusta del gusto que gusta mi gusto, mi gusto no gusta del gusto que gusta tu gusto

El popurrí era el despiporre total. El equipo perdedor cantaba todo un mix de canciones y debía hacerlo con el mayor énfasis posible. Para ello se subían a las mesas, se metían entre el público e incluso se iban hacia el equipo contrario para animarles a cantar; era el único momento de “buen rollo” entre ambos sexos y, si se lo curraban lo suficiente, Alonso les daba un nuevo punto en su marcador. Todo ello aderezado con la interpretación en playback del cantante de turno, que pasaba por allí para promocionarse a sí mismo y a su nuevo disco.

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El sistema de los puntos era, básicamente, una excusa. El equipo ganador conseguía un punto, (medio punto en caso de que no se supere completamente la prueba o un minipunto en las pruebas con varias fases), pero generalmente con el Popurrí el equipo contrario conseguía empatar, por lo que casi siempre llegaban al final del programa empatados a puntos. Y si existía una gran diferencia, no pasaba nada, Alonso Caparrós se sacaba de la manga que la última prueba valía cinco puntos, y ya está, todo se nivelaba por completo.

Repercursión del programa

‘Furor’ fue el éxito del momento, por lo que cualquier famosillo que quisiera permanecer en la palestra, debía pasar por allí (ahora pasan por ‘Sálvame’, decidme vosotros qué es peor). En el programa estuvieron Fernando Romay, Alex Casademunt, Tamara (la buena), Sylvia Pantoja, Rosario Mohedano, Julio Iglesias Jr. e incluso el hermanísimo del presentador, Andrés Caparrós, convirtiendo aquello en una lucha entre hermanos (”este finde no te dejo el coche“, “si no me das el punto se lo digo a mamá...“).

‘Furor’ fue, además, de los últimos concursos que incluía infografía en pantalla, algo que ahora estaría pasadísimo de moda; me refiero a esos cartelitos con frases al estilo “Estos sí que dan el cante“ que aparecían cuando terminaba una canción. El cuerpo de bailarinas también se hizo muy famoso, y el bailecito que se marcaba Alonso al empezar el programa junto a las chicas era uno de los momentos cumbre más referenciados cada vez que le entrevistaban.

Y la cosa trasciende más allá de la pantalla. Teniendo en cuenta la simplicidad y arbitrariedad del concurso, no es de extrañar que cada vez que haya una reunión de amigos más o menos multitudinaria (y con unas copitas de más) se acabe jugando a Furor. En mi caso particular, jugué a Furor cuando era pequeño, y aún hoy siguen saliendo algunas de las pruebas cuando nos reunimos un grupo nutrido de personas. Y seguro que vosotros también lo hacéis, por mucho que os duela admitirlo.

Trayectoria en televisión de ‘Furor’

Antena 3 estrenó el programa un 3 de octubre de 1998, y se mantuvo durante tres temporadas hasta junio de 2001 con un éxito evidente (27% en su primera temporada y siempre por encima del 20% en los dos años posteriores). Tras su cancelación, la FORTA decidió recuperar el formato en 2006, pero el tema no cuajó en la audiencia y apenas duró unas semanas en antena. Supongo que algunos formatos están hechos para una época y son perecederos, y ‘Furor’ es uno de ellos. ¿Os imagináis el programa ahora mismo con Belén Esteban frente a Jorge Javier Vázquez? Antes que eso prefiero hacerme el harakiri.

Ficha Técnica: ‘Furor’

La noche de los sábados en la televisión a finales de los 90 era toda una aventura para el espectador que se atrevía a coger el mando a distancia. Entre el cine de algunas cadenas, teníamos dos ofertas que levantaban tantos odios como pasiones. Por un lado, la mítica ‘Noche de Fiesta’ en La 1 de TVE (que se merece un Nostalgia para ella sola que le dedicaremos en semanas posteriores); y en segundo lugar, después de varios fracasos en esa franja, Antena 3 consiguió un éxito arrollador con ‘Furor’, un programa-concurso-espectáculo que venía avalado por su éxito en distintos mercados europeos.

Alonso Caparrós volvía de esta forma al prime time para ponerse al frente de esta guerra de sexos entre famosos. Con un tono absolutamente desenfadado donde las reglas brillaban por su ausencia, ‘Furor’ triunfó en su momento por la combinación de música, humor y famosillos de mediano calibre, combinado todo con una encarnizada lucha entre hombres y mujeres por colocar al sexo dominante (cada uno al suyo) por encima del contrario. Nostalgia TV retrocede hoy doce años en el pasado para cantar eso de… “furor, furor, nana nana nanana“.

Reglas del concurso en ‘Furor’

Hablar de las reglas en un concurso que no tiene reglas no tiene demasiado sentido, pero sí existía una mecánica constante de pruebas en la que el juez todopoderoso, Alonso Caparrós, tenía la última palabra. La mayoría de pruebas estaban relacionadas con la música, ya sea cantando o respondiendo preguntas específicas sobre alguna canción o cantante en particular. El equipo que perdía la prueba, debía someterse entonces al “Popurrí”, un mix de canciones que debían cantar como castigo por haber fallado.

Las pruebas eran de lo más variopintas. Desde completar espacios en blanco mientras se cantaba una canción hasta interpretar un tema utilizando siempre la misma vocal (”pere beeler le bembe se necesete ene peque de grecee…“), pasando por encontrar canciones que tengan en su letra una palabra específica (amor, muerte, dolor…) o adivinar el título de una canción utilizando para ello las pistas que daba el presentador. Las pruebas variaban de una semana a otra, pero cada noche caían unas treinta canciones que el sufrido espectador aguantaba como un jabato.

Pero también había pruebas que no tenían nada que ver con la música, como las de agudeza visual o la prueba de los mensajitos, donde los concursantes tenían que escribir una frase o poema a alguien del equipo contrario y éste tenía que adivinar a quién iba dirigido. Pero mi prueba favorita era la del trabalenguas: A cada equipo se le asignaba un trabalenguas, y todos sus miembros de forma individual tenían que decirlo sin equivocarse antes de que se acabara el tiempo. Era el único momento en que los oídos no sufrían, y algunos de esos trabalenguas se repetían tanto que incluso doce años después sigo acordándome de uno de ellos:

Si tu gusto gustara del gusto que gusta mi gusto, mi gusto gustaría del gusto que gusta tu gusto. Pero como tu gusto no gusta del gusto que gusta mi gusto, mi gusto no gusta del gusto que gusta tu gusto

El popurrí era el despiporre total. El equipo perdedor cantaba todo un mix de canciones y debía hacerlo con el mayor énfasis posible. Para ello se subían a las mesas, se metían entre el público e incluso se iban hacia el equipo contrario para animarles a cantar; era el único momento de “buen rollo” entre ambos sexos y, si se lo curraban lo suficiente, Alonso les daba un nuevo punto en su marcador. Todo ello aderezado con la interpretación en playback del cantante de turno, que pasaba por allí para promocionarse a sí mismo y a su nuevo disco.

El sistema de los puntos era, básicamente, una excusa. El equipo ganador conseguía un punto, (medio punto en caso de que no se supere completamente la prueba o un minipunto en las pruebas con varias fases), pero generalmente con el Popurrí el equipo contrario conseguía empatar, por lo que casi siempre llegaban al final del programa empatados a puntos. Y si existía una gran diferencia, no pasaba nada, Alonso Caparrós se sacaba de la manga que la última prueba valía cinco puntos, y ya está, todo se nivelaba por completo.

Repercursión del programa

‘Furor’ fue el éxito del momento, por lo que cualquier famosillo que quisiera permanecer en la palestra, debía pasar por allí (ahora pasan por ‘Sálvame’, decidme vosotros qué es peor). En el programa estuvieron Fernando Romay, Alex Casademunt, Tamara (la buena), Sylvia Pantoja, Rosario Mohedano, Julio Iglesias Jr. e incluso el hermanísimo del presentador, Andrés Caparrós, convirtiendo aquello en una lucha entre hermanos (”este finde no te dejo el coche“, “si no me das el punto se lo digo a mamá...“).

‘Furor’ fue, además, de los últimos concursos que incluía infografía en pantalla, algo que ahora estaría pasadísimo de moda; me refiero a esos cartelitos con frases al estilo “Estos sí que dan el cante“ que aparecían cuando terminaba una canción. El cuerpo de bailarinas también se hizo muy famoso, y el bailecito que se marcaba Alonso al empezar el programa junto a las chicas era uno de los momentos cumbre más referenciados cada vez que le entrevistaban.

Y la cosa trasciende más allá de la pantalla. Teniendo en cuenta la simplicidad y arbitrariedad del concurso, no es de extrañar que cada vez que haya una reunión de amigos más o menos multitudinaria (y con unas copitas de más) se acabe jugando a Furor. En mi caso particular, jugué a Furor cuando era pequeño, y aún hoy siguen saliendo algunas de las pruebas cuando nos reunimos un grupo nutrido de personas. Y seguro que vosotros también lo hacéis, por mucho que os duela admitirlo.

Trayectoria en televisión de ‘Furor’

Antena 3 estrenó el programa un 3 de octubre de 1998, y se mantuvo durante tres temporadas hasta junio de 2001 con un éxito evidente (27% en su primera temporada y siempre por encima del 20% en los dos años posteriores). Tras su cancelación, la FORTA decidió recuperar el formato en 2006, pero el tema no cuajó en la audiencia y apenas duró unas semanas en antena. Supongo que algunos formatos están hechos para una época y son perecederos, y ‘Furor’ es uno de ellos. ¿Os imagináis el programa ahora mismo con Belén Esteban frente a Jorge Javier Vázquez? Antes que eso prefiero hacerme el harakiri.

Reglas del concurso en ‘Furor’

• Título Original: ‘Furor’
• Género: Concurso
• Cadena: Antena 3
• Emitida en España: Antena 3 (1998-2001) y La Forta (2006)

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• Título Original: ‘Furor’

• Género: Concurso

• Cadena: Antena 3

• Emitida en España: Antena 3 (1998-2001) y La Forta (2006)

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