Programas como La Casa de tu Vida en Telecinco, Unan1mous en Antena 3 o la reciente MIR que ha cambiado el día de emisión son las víctimas de esta obsesión de las dos cadenas privadas "antiguas" por el 20% de share. Y yo me pregunto ¿es realmente ese 20% lo que convierte a un producto en exitoso? El panorama ha cambiado bastante debido a la aparición de la TDT y las dos cadenas nuevas (La Sexta y Cuatro), y ahora es realmente complicado conseguir ese tanto por ciento de share. Sólo algunos productos estrella de las cadenas como CSI, Los Hombres de Paco, Operación Triunfo o, recientemente, House son capaces de llegar a esa ansiada cifra (e incluso superarla).
Es por esto que no comprendo por qué las Telecinco y Antena 3 están tan obsesionadas con que sus productos ronden esos datos. Porque lo normal es que un programa o serie no llegue al 20% fácilmente, y menos aún si es nuevo el producto, pero estas dos cadenas se empeñan en ser muy estrictas con sus productos y quieren que ronden entre el 17 y el 20% de share a las primeras de cambio, sino, las cambian de día o simplemente las cancelan. Actualmente aún es posible alcanzar estos datos con bastante, digamos, holgura, pero pensemos una cosa ¿qué pasará cuando Cuatro tenga un público fidelizado como está empezando a tener? ¿Y cuando la antenización sea completa y La Sexta comience a subir por encima del 10% en la media? ¿Es entonces cuando las privadas antiguas modificarán su política? En mi opinión, cuando esto ocurra, las cadenas más antiguas tendrán que revisar su política, se verán obligadas a mirar más el target de las audiencias y menos la cantidad de telespectadores. Porque esto en España casi no se utiliza (o no se comenta que se utilice), pero muchas veces la publicidad es más eficiente si tienes más audiencia dentro de la franja de edad a la que está orientada el producto y, consecuentemente, la publicidad que se emite.
Pero vamos, que Telecinco y Antena 3 seguirán erre que erre con esta política, por lo menos, un año más. Sin darse cuenta que no es culpa de sus productos, sino del mercado televisivo y publicitario, que está cambiando, y ellas tendrán que cambiar con este mercado.