Esto tiene que ser cosa de espionaje industrial si no no acabo de entender cómo de cara a la nueva temporada todos los programas de mañana se proponen hacer en esencia…, ¡lo mismo que hacen los competidores! ‘El programa de Ana Rosa’ y ‘Espejo Público’ han presentado sus nuevas temporadas que empezarán el lunes y cualquiera diría que los contenidos los han diseñado las mismas personas.
El pelotazo, sin ningún género de duda, lo ha dado ‘El programa de Ana Rosa’ al fichar a Federico Jiménez Losantos para su tertulia política. Puede que Losantos quiera aprovechar esta oportunidad para suavizar su imagen de crítico voraz (por no decir otra cosa), pero si no fuese a resultar polémico Ana Rosa no lo querría para nada. Para compensar han anunciado también el fichaje de Rosa María Calaf, una excelente periodista de las clásicas de Televisión Española a la que se quitaron de encima ERE mediante. Espero que sepa dónde se mete.
En cuanto a contenidos, ambos espacios harán un seguimiento de dos temas que preocupan a la sociedad española: La gripe A y la crisis económica. Originales a más no poder. ¿Dictarán mensajes tranquilizadores? No faltarán los bloques de crónica social, los reportajes de temas de incidencia social, tertulias, la respuesta a denuncias de los ciudadanos y la interacción con ambos espacios vía web. Programas casi calcados que empezarán a la misma hora, a las nueve de la mañana, pegados a los espacios de noticias que tanto Antena 3 como Telecinco tienen a primera hora de la mañana.
Cierto es que ‘Espejo Público’ está producido por los Servicios Informativos de Antena 3 y no sé si eso es garantía de algo pero a priori intenta separar el tratamiento que se hace de la actualidad del que hacen en ‘El programa de Ana Rosa’, producido por la propia Quintana y, se supone, con criterios diferentes. Pese a esto, Susanna Griso ha decidido inaugurar una tertulia de “gente sensata” (cómo serán las otras tertulias), en la que estarán Leopoldo Abadía y Jesús Neira, y una tertulia con humoristas gráficos. Será por tertulias.
‘El programa de Ana Rosa’ seguirá haciendo explotación televisiva de los realities de la cadena, como ha hecho siempre, pero habrá que ver qué hacen en ‘Espejo Público’ si ‘Curso del 63’ termina funcionando. Tendrán que darle espacio y se parecerán aún más si cabe a la competencia.
Personalmente no me siento identificada con ninguno de los dos programas pero son espacios muy influyentes en un target muy específico, el de las amas de casa, y todos tenemos un ama de casa cerca. Ésta es la oferta que las cadenas suponen que prefieren las mujeres que están en casa: tertulias ligeritas, sucesos, corazón y demagogia disfrazada de rigor periodístico. Parece que ‘Espejo Público’ gusta más a un público más joven y heterogéneo pero creo que eso forma parte de la campaña de imagen del programa que busca distinguirse así de la competencia. A niveles prácticos y por desgracia la oferta se reduce y tanto monta, monta tanto. Una pena.
En ¡Vaya Tele! | Ramón Arangüena, quién te ha visto…