'Chappie': Neill Blomkamp endereza el rumbo a medias tras el patinazo con 'Elysium'

Neill Blomkamp parece ser uno de los directores favoritos de las cadenas de televisión españolas en abierto durante este verano. Hace apenas unos días pudimos ver 'Elyium' en La 1 y hoy es Antena 3 la que recupera 'Chappie' a partir de las 23:00.

'Chappie' nos lleva a un futuro cercano para ver cómo Chappie, un policia androide, se convierte en el primer robot que puede pensar y sentir por sí mismo. Eso sucede tras ser reprogramado una vez robado, pero su existencia pronto llega a las altas esferas y su eliminación se convierte en objetivo prioritario en este oscuro futuro no tan lejano en el tiempo.

Funciona mejor cuando apuesta por la ligereza

El propio Blomkamp reconoció en su momento que 'Elysium' no era muy buena pero sí que había quedado satisfecho en lo referente a 'Chappie'. Por mi parte, sí que veo la película como un paso adelante respecto a su prececesora, pero aún así se sigue quedando lejos de 'District 9', su gran carta de presentación tanto para Hollywood como para los espectadores de todo el mundo.

Comparada en su momento no sin cierta razón con 'Cortocircuito', 'Chappie' funciona mejor cuando apuesta por lo cómico y ligero, consiguiendo que el público se familiarice y coja cariño a su robótico protagonista con la voz de Sharlto Copley, actor fetiche de Blomkamp. El trabajo vocal del actor también resulta esencial para ello.

Menos estimulante es cuando los acontecimientos se precipitan y Blomkamp se deja llevar por una espectacularidad que inicialmente funciona porque va recogiendo lo cultivado previamente, pero luego acaba cansando. Tampoco ayuda que la mayoría del reparto humano esté desaprovechado, salvándose Dev Patel en sus primeras apariciones, aunque luego llega a resultar casi molesto a medida que avanza la película.

A su manera se podría decir que 'Chappie' va de más a menos, pero lo cierto es que nunca llega a brillar con tanta fuerza como 'District 9', pero a cambio tampoco se hunde tanto como 'Elysium'. Al final se queda un poco en tierra de nadie, pero pese a sus problemas es un pasatiempo con corazón al que merece la pena echar un vistazo.

En lo referente a su resultado en taquilla no se puede hablar con propiedad de ser un fracaso, ya que costó 49 millones de dólares (seguramente sin incluir los gastos de la campaña publicitaria) y recaudó 102 millones, pero lo que sí está claro es que Blomkamp no ha vuelto a dirigir un largometraje desde 'Chappie', y eso que se estrenó en el ya algo lejano 2015.