¿Por qué en 'One Piece' Usopp es cada vez más blanco? El "whitewashing" es un problema en el anime, pero (por desgracia) también lo hace mucho más cercano al manga original

El remake de 'One Piece' para Netflix por fin ha dejado ver sus primeras imágenes. Y mientras que muchos fans están encantados con la pinta que tiene 'The One Piece' las comparaciones con los capítulos del East Blue del anime original. Y una de las más sonadas ha sido el diseño de Usopp. Bueno, más bien que Usopp se ha dejado toda la melanina por el camino.

El tema del color de piel de Usopp trae cola desde hace años, y muchos fans han ido señalando desde hace mucho tiempo cómo se ha ido volviendo cada vez más pálido en el anime de Toei Animation.

Y cómo en el nuevo anime de Wit Studio tiene un tono de piel idéntico al de sus compañeros de tripulación, con lo que muchos fans han saltado a acusar de whitewashing al nuevo anime... Bueno, y otros tantos directamente esperan que sea blanco nuclear para cuando termine 'One Piece' como siga evolucionando así la cosa.

¿Es Usopp cada vez más blanco? Pues objetivamente se puede decir que sí, que su tono de piel ha ido cambiando mucho a lo largo de la serie (y no es el único). Pero la razón no es sencilla y aquí hay varios factores a tener en cuenta. Algunos son culturales, y otros son técnicos, y ninguno da una explicación fácil.

(Casi) todos los colores del arcoiris

Si echamos la vista atrás, a los animes de la década de 1980 y 1990, tenemos paletas de colores muy diferentes, con colores mucho mas vivos y brillantes, y que a menudo resulta en tonos de piel más oscuros para todos los personajes.

Incluso los personajes "blancos", tienen paletas con tonos más brillantes o se los puede considerar como morenos o bronceados. Y una de las razones para ello era por la limitación de colores, especialmente porque los animes se realizaban con técnicas tradicionales. Los pigmentos son increíblemente caros, y para ponernos las cosas en perspectiva la serie original de 'Gundam' de 1979 apenas utilizaba 80 colores.

Además, los animes también estaban diseñados pensando en las televisiones de menor calidad y en la emisión en sí, con lo que los colores tenían que ser mucho más vivos y fuertes para que se pudieran diferenciar sin problemas. Ciertas paletas con colores desaturados podrían generar problemas, por lo que los colores eran muy saturados, y esto incluía los tonos de piel, ojos, ropa y el diseño en sí de toda la producción.

A partir de los años 2000 y 2010 se comenzó a apostar mucho más por las técnicas digitales, que se convirtieron en el standard de producción de anime. Y así tenemos multitud de efectos especiales y colores que anteriormente no se podían conseguir tan fácilmente, y esto se aprecia perfectamente en el anime de 'One Piece', que con sus 25 años de historia es un reflejo perfecto de cómo han ido cambiando las corrientes y técnicas en la industria del anime a lo largo de su emisión.

Las primeras sagas de 'One Piece' tienen este tipo de colores saturados y brillantes, pero a partir del Time Skip, el salto temporal que divide en dos la historia, nos encontramos con un cambio de diseño de personajes y un cambio de colores. Y tiene sentido, porque el capítulo 517 con el que se inicia la segunda parte del anime se estrenó el 2 de octubre de 2011.

Aquí ya vimos cómo Usopp... Y Robin, y Zoro, e incluso Luffy, se volvieron más pálidos y todo el anime en sí dio un volantazo hacia colores más pastel y más claros en general que se ha ido acentuando todavía más en las sagas más recientes. No solo para seguir la corriente artística que se fue imponiendo en otros animes, sino también para parecerse más a los diseños originales de Eiichiro Oda.

Fidelidad (y belleza con su toque colorista)

Ni Robin es morena de piel ni Usopp es negro en los mangas de Oda. O al menos (aunque diga que Usopp es africano), Oda no le dibuja con piel negra ni diferente al resto de la tripulación. Porque si echamos un vistazo a las portadas e ilustraciones a color del manga de 'One Piece', prácticamente todos los personajes parecen haber sido coloreados con exactamente el mismo tono de piel.

Ahora bien, lo que hay que tener en cuenta es que, a menos que se indique lo contrario, los personajes de anime no son blancos occidentales por muy pálidos que sean. Son japoneses, y se guían por los estándares de belleza japoneses (y también por sus propias modas y estéticas).

Aunque en los últimos años se ha ido dando más importancia al mercado internacional, los animes siguen teniendo como foco principal el mercado japonés, así que se van a guiar por los cánones de belleza del país. Y estos dictan que la piel pálida es bella y un signo de juventud... Por lo que, inevitablemente, los diseños de personaje gravitarán hacia la normal de lo que es considerado bonito o "normal" .

Porque según lo estimado en 2020, apenas el 2,3% de la población pertenece a otras etnias. Con un 0,05% correspondiente a europeos y norteamericanos, 0,20% a sudamericanos y un o,50% a un amalgama de africanos y asiáticos occidentales. Así que diversidad racial en Japón, que digamos, mucha, mucha no hay. Y esto es algo que los animes también terminan reflejando con sus elecciones de color y diseños de personaje, aunque sea de manera inconsciente y sin ninguna mala intención por parte de los autores.

Pero aunque no haya ningún tipo de agenda secreta ni mala intención colorista, no se puede negar que personajes como Usopp, que siempre se ha visto codificado como negro e incluso es interpretado por un actor negro (Jacob Romero Gibson) en el live action de Netflix... ahora es más blanco que la leche.

E incluso lo mismo ocurre con Luffy, que también se ha ido volviendo mucho más pálido y es interpretado por un actor mexicano, Iñaki Godoy. Aunque en el caso de Usopp muchos fans lo han aceptado siempre como negro también por el combo de pelo rizado y labios gruesos.

Los colores que hemos visto en los avances de Wit Studio no tienen por qué ser los definitivos, aunque apuntan a que todos los personajes tendrán un acabado con menos saturación para todos los personajes. Pero desde luego sí que continúan una tendencia al "whitewashing" que ya hemos visto en el anime de Toei, con todo el componente racista que tiene detrás al considerar la piel pálida la más bella o la "normal" por defecto.

El whitewashing, o quitarle la melanina a todos los personajes que se pueda, es una cuestión cultural, racial y social, y no tiene pinta de que se vaya a resolver pronto... Aunque por lo menos la industria va dando pasitos para corregir sus estereotipos más racistas, como ya hizo en su momento el remake de 'Shaman King'.

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