Para los pocos que aún no lo sepan, la muestra 'Chaplin en imágenes' estará en la sede de CaixaForum de Madrid hasta el 19 de octubre de este año. La exposición hace un repaso a su obra. En concreto, reúne alrededor de 250 documentos entre álbumes, recortes y fotografías, e incluso se pueden visionar algunos divertidos extractos de películas, junto a series de fotos y material inédito de uno de los mayores genios del 7º arte.
Esta introducción sirve para refrescar la memoria sobre la figura de Charles Chaplin y sobre el personaje que inmortalizó, Charlot, que es un nombre que sólo se utiliza en español, en francés y en italiano (por ejemplo, en Brasil le llaman Carlitos). En realidad, el personaje de Charlot no tenía nombre, era simplemente un vagabundo, o "The tramp", como así aparece reconocido en todos los créditos de sus obras. Quizás esa sea su grandeza, la de un desconocido sin nombre. Chaplin se inventó un personaje tanto en sus ideales, como en sus gestos, sus pensamientos, y su manera de vestir. Quería algo diferente a lo que veía en la realidad en el día a día, buscar la forma de poner los pies en el suelo en el denominado sueño americano. Su particular crítica social. Así, definió un hombre con las maneras refinadas y la dignidad de un caballero, emotivo, sentimental, melancólico frente a la injusticia de la sociedad moderna. Además, le quiso hacer caminar de una manera inconfundible y reconocible.
También fue determinante su indumentaria de vagabundo. Parece ser que el famoso traje se lo compuso mediante aportaciones de cómicos amigos: la chaqueta de Charles Avery, estrecha, los pantalones de Fatty Arbuckle y las botas de Ford Sterling, más grandes que su talla, el bigote de Mark Twain, que era pintado, un sombrero bombín que le venía pequeño y un bastón arqueado, lo único propio de Chaplin que incorporó a la indumentaria.
Todo lo anterior, tanto en cómo elaboró el perfil del vagabundo, como los elementos visuales que le caracterizarían, quedaron determinados en el final de 'The Tramp', un mediometraje de la Essanay, en el que sobresale su lírico y triste final, con Charlot de espaldas, alejándose por el camino, hasta que empieza a moverse alegremente (quien puede olvidar el salto en aire con golpe de talones), mientras la cámara ha ido cerrando paulatinamente el iris a negro. Imagen que es uno de los iconos de la historia del cine.
La primera ocasión en la que apareció el personaje de Charlot fue en 'The Kid Auto Race In Venice', que interpretó para Mack Sennett dentro de Keystone. No era el actor principal, pero en ese trabajo dio sus primeras pinceladas el personaje. Su debut como protagonista sucedió en 'Making a Living', también para Keystone, al que muchos consideran de verdad el primer papel de Charlot, y que le dio fama y éxito instántaneo.
Sin embargo, sus mejores trabajos en el mundo del cortometraje, y en estos primeros años, fueron primero para la productora Essanay, y después para Mutual (en esta última con control absoluto sobre toda la obra), todo esto antes de fundar el mismo United Artists con otros actores. En esos años 1915 a 1917, principalmente, y ya cuando dirigía sus propias películas, estableció su método de trabajo. Se reunió de un grupo estable de actores y colaboradores habituales y de confianza, entre los que destacaba la actriz Edna Purviance (de la que se puede decir que fue su gran pareja artística). Allí, estableció un estilo dirigiendo: obsesivo en su trabajo, repetía cuantas veces fuese necesario las tomas hasta que la coreografía de los personajes encajaba perfectamente (recordar que estamos en la época del cine mudo).
Por ese motivo, os traemos varios de los trabajos de esta época de su filmografía, auténticas joyas, que en los años 20 y siguiente verían su continuación en obras como 'El chico', 'La quimera del oro', 'El circo', 'Luces de la ciudad', 'Tiempos modernos' y 'El gran dictador'. En 'Tiempos modernos' se dice que Chaplin enterró el personaje de Charlot, con un final en el que caminaba sin rumbo hacia lo que el futuro le deparase. Sin embargo, recuperó el personaje en estilo, no como un vagabundo sino como un barbero, en El gran dictador, donde se puede decir que el personaje de Charlot en sí hizo su última aparición.
¿Os preguntaráis por qué 'Wall-E' aparece en el título de la entrada? La razón es simple. Wall-E es un homenaje al cine mudo que representaron Charles Chaplin y Buster Keaton. Los gags son visuales, y la sinceridad, expresividad, inocencia y ganas de luchar corresponden a Charlot, que en la mayoría de sus aventuras se movía siempre por amor. Cualquiera que vea la película de Pixar y lo compare con todos estos cortometrajes de Charles Chaplin y su vagabundo, entenderá lo que digo. Pixar demuestra que se los vio, y los acopló a la caracterización de su robot. Porque el personaje de Wall-E es tan grande, que cumple, y con creces en su homenaje al maestro en que se basó. Ese Charlot, Charles Chaplin, que uno tiene como momento álgido del cine de toda la vida. Esa es una razón, entre otras, para ver 'Wall-E'.
The Kid Auto Race In Venice, 1914
Making a living (Charlot periodista), 1914
Chaplin interpreta a un falso aristócrata inglés, que adquiere trabajo como reportero, donde, entre otras ocurrencias, roba las notas y la cámara de un compañero para darse la autoría de una noticia. El afectado lo persigue en una secuencia cómica muy caótica, en la que terminan ambos en el quita piedras de un tranvía.
The Tramp (Charlot vagabundo), 1915, Parte 1
El vagabundo Charlot salva a una damisela en apuros, que pasea por el bosque con su dinero demasiado a la vista. Agradecido, su padre le ficha para que trabaje en su granja, donde arma más de un lío mientras se enciende su amor por la chica.
The Tramp (Charlot vagabundo), 1915, Parte 2
The Champion (Charlot boxeador), 1915
Charlot, en una memorable interpretación, es un vagabundo sin futuro que para comer se mete de sparring de boxeo. Sin querer tumba a un boxeador y le entrenan para combatir por el campeonato del mundo. Entre medias quieren amañarle el combate y se enamora de la hija de su entrenador.
De esta película es complicadísimo encontrar una versión completa con los 30 minutos que la forman. Hay distintas versiones con cortes, saltos en el tiempo, retirada de carteles con información. A los genios también los maltrataban en los albores del cine. La que hemos encontrado es una versión de 20 minutos, que deja ver la genialidad de Chaplin pese a los recortes.
The vagabond (Charlot músico ambulante), 1916, Parte 1
Charlot es un músico ambulante que hace amistad con una joven que ha sido raptada por unos gitanos. Aquí es donde demuestra el patetismo y a la vez la más genial ternura de sus primeras actuaciones.
The vagabond (Charlot músico ambulante), 1916, Parte 2
The vagabond (Charlot músico ambulante), 1916, Parte 3
One AM (Charlot a la una de la madrugada), 1916, Parte 1
Charlot vuelve a la casa de un amigo después de una noche de juerga. No tiene la llave y sufre diversos tropiezos con una pecera, animales embalsamados, un suelo encerado y una cama empotrada en la pared.
One AM (Charlot a la una de la madrugada), 1916, Parte 2
The pawnshop (Charlot prestamista), 1916
Charlot trabaja en una tienda de empeños. Todo le sale mal hasta que un día afortunado salva a la tienda y a su jefe de un robo en la misma.
Easy street (Charlot en la calle de la paz), 1917, Parte 1
Charlot se presenta para guardia municipal y consigue el trabajo. Ahora tendrá que buscar el valor para desempeñar su arriesgada misión ante los delincuentes.
Easy street (Charlot en la calle de la paz), 1917, Parte 2
Easy street (Charlot en la calle de la paz), 1917, Parte 3
The adventurer (Charlot presidario), 1917, Parte 1
La alarma suena y un presidiario desesperado se escapa de manos de la ley. Charlot, es el preso por "error" que origina los problemas más increíbles a la policía.
The adventurer (Charlot presidario), 1917, Parte 2
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