Ben Stiller dice que 'Tropic Thunder' "no se podría hacer hoy" por el personaje pintado de negro de Robert Downey Jr. y la situación de la comedia

Ben Stiller duda que su comedia satírica de 2008 'Tropic Thunder' pudiera hacerse hoy en día. La película, centrada en un grupo de actores que ruedan una película sobre la guerra de Vietnam, recaudó casi 200 millones de dólares en todo el mundo y obtuvo una nominación al Oscar como actor secundario gracias a Robert Downey Jr. Pero es el personaje de Downey el que probablemente impediría que hoy despegara en el Hollywood de 2024.

Una sátira sobre lo problemático del Black face que resulta problemática

Downey protagonizó 'Tropic Thunder' en el papel de Kirk Lazarus, un actor australiano que lleva la interpretación del método a un extremo poco ético al ponerse la cara negra (o someterse a una operación de alteración de la pigmentación, como él dice) para interpretar a un soldado negro en una película sobre Vietnam. Stiller comentaba la locura a la que llegan los actores para ganar premios, pero ahora le resulta demasiado "arriesgado" para volver a hacerlo.

Stiller reveló en una entrevista a Collider, por su nueva temporada de 'Severance', que el ambiente en Hollywood ha cambiado.

"Obviamente, en este entorno, es más difícil hacer comedias más atrevidas. Definitivamente no a la escala a la que la hicimos, también, en términos de la economía del negocio. Creo que incluso en aquel momento tuvimos suerte de que se hiciera, y se lo atribuyo a Steven Spielberg y DreamWorks. Él la leyó y dijo: De acuerdo, hagámosla. Es una película muy pare la industria si lo piensas".

Stiller escribió en su perfil de X el año pasado que no se disculpa por 'Tropic Thunder', y añadió que siempre ha sido una película polémica desde el estreno, y sigue "Orgulloso de ella y del trabajo que todos hicieron en ella". Ahora se abre sobre el aspecto más conflictivo:

"La idea de que Robert interpretara a un personaje afroamericano era increíblemente arriesgada incluso en aquel momento, por supuesto que también era arriesgado. La única razón por la que lo intentamos fue porque me pareció que el chiste estaba muy claro en cuanto a quién iba dirigido: actores que intentan hacer cualquier cosa para ganar premios. Pero ahora, en este ambiente, ni siquiera sé si me habría aventurado a hacerlo, a decir verdad. Estoy siendo sincero".

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