La primera edición del programa Tengo una pregunta para usted sin un político como protagonista no mantuvo el interés de la audiencia, ya que únicamente congregó a 2.491.000 espectadores, un 13,5% de cuota de pantalla. Eso supone un descenso de más de ocho puntos y medio respecto al anterior programa, que tuvo como invitados a Llamazares, Duran i Lleida y Carod Rovira. Además, supone el mantenimiento del nivel de audiencia que obtuvo la cadena la semana pasada con cine.
El programa de ayer acogió a un Luis Aragonés mucho más comedido de lo esperado, lo que repercutió en que se produjeran menos momentos tensos que en otras ocasiones. El público estuvo mucho más suelto y espontáneo, algo indispensable para que este programa funcione y tenga ritmo, y que había fallado en alguna edición anterior. Con todo, y admitiendo que Tengo una pregunta para usted sigue resultando entretenido, resulta muy difícil que un solo personaje, por muy seleccionador nacional que sea, mantenga el interés de la audiencia durante casi dos horas en prime time. Creo que la duración en este caso fue excesiva.
Estos malos resultados de audiencia limitan en gran medida la posibilidad de continuar el programa con otro tipo de personajes diferentes a los políticos. Da la sensación de que si no se emite puntualmente y con personajes de gran relevancia, no funciona. Se me ocurren pocos profesionales que pudieran despertar el interés que despierta Luis Aragonés y, sin embargo, no parece que fuera suficiente para levantar el programa. Probablemente ahora, TVE se replantee su intención de continuarlo y ampliar el abanico de invitados.
En ¡Vaya Tele! | Luis Aragonés en Tengo una pregunta para usted
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