El desenlace más insólito de una cita en 'First Dates'. "Hacemos un buen trío"

Sara quiere un novio rico, a Álvaro le encanta hacer poses misteriosas y Usu asegura que antes era un tiburón en el amor 

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Sara volvió después de las calabazas de la última cita en 'First Dates', y esta vez tuvo éxito por duplicado: tanto Álvaro como Usu le gustaron y  la esperpéntica cita acabó de la mejor de las maneras posibles.

Donde caben dos

Sara tiene 24 años, vive en Madrid, trabaja como reponedora y estudia Psicología. "No me gusta madrugar para trabajar, quiero una vida fácil" explicó para justificar que buscaba un chico rico. Al entrar, Carlos Sobera le reveló que iba a tener una cita doble, con dos chicos diferentes.

El primero era Álvaro, de 21 años, artista, modelo, árbitro de fútbol y valenciano. Cuando entró, se arrancó de repente a cantar y bailar y a Sara le dio mucha vergüenza ajena. Tanta que al final decidió levantarse e hizo amago de irse: "Me voy, me parece una falta de respeto".

"Si tienes dinero, te lo perdono" accedió ella finalmente. "Tengo un movimiento de caderas que no os lo vais a creer" contestó Álvaro. Sara halagó su "collar de perlas de los chinos", él le garantizó que lo había comprado por internet y le demostró sus dotes de modelo poniendo posecitas.

First Dates Cita Las caras, Juan, las caras

Cuando confesó que le encantaba Avril Lavigne, Sara reaccionó contándole las teorías de su supuesta muerte: "Se murió su abuelo, entró en depresión y se la encontraron muerta. La sustituyeron por otra, a la que le hicieron los mismos tatuajes y le afilaron los dientes".

Después de decirle que se parecía a Bustamante, le llegó el turno a la segunda cita: Alberto "Usu" de 29 años, madrileño, comercial y cantante: "Soy un muerto con las chicas, soy lamentable. Antes era un tiburón". Al ver a Sara, se fijó en que tenía el pintalabios corrido y se pensó lo peor: "Se ha comido al otro".

First Dates Sara terminó la cita por los suelos

Después de confesarle que se lo había emborronado solo para trolear, a Sara le salió el símbolo de dólar en los ojos al oír que Usu era de Andorra: "No soy bisexual, pero por 30 euros podría serlo". Tras pasar una cita agradable, Sara y los otros dos chicos fueron al reservado a terminar la cena.

Al verlos tan acaramelados comiéndose el postre, Sara les preguntó si no terminarían enrollados ellos dos: "Pues a lo mejor" contestó Usu. "Hacemos un buen trío y seríamos un buena pareja amorosa" admitió ella. En la decisión final, Sara dijo que quería una segunda cita con los dos y a ellos les pareció bien.

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